GIMNASIA

Despedida con matrícula de honor al Marusia y a Lukonina

OURENSE (PAZO DOS DEPORTES PACO PAZ). 31/03/2018. OURENSE. Exhibición de gimnasia rítmica y entrega de obsequios al finalizar la misma. FOTO: ÓSCAR PINAL

Diana Simoshina
photo_camera La gala final dejó patente la calidad de los numeros de las gimnastas.

Después de tres intensos días con la mejor gimnasia, la máster class de Yana Lukonina y la gala final pusieron el colofón un evento de mucho nivel

Cada año va a más. El Torneo Internacional Ourense A Provincia Termal que organiza el Club Marusia cerró su séptima edición con unas cifras espectaculares. De participación, de nivel y de público. Cerca de un millar de deportistas se dieron cita en el Paco Paz desde el jueves al sábado para hacer de todo un poco: competiciones individuales, por equipos, absolutas y, sobre todo, de base. 

Pero más allá de la competición, el objetivo principal del torneo es que las gimnastas vivan la experiencia al máximo, conociendo niñas nuevas, trabajando bajo métodos de entrenamiento novedosos y conviviendo durante tres jornadas. Y lo han vuelto a conseguir delante de unas gradas repletas de padres, madres y abuelos y orgullosos. 
"Todo ha ido genial. Da gusto ver las gradas llenas o las 14.000 personas que siguieron el streaming", destaca Pili Cobelas, entrenadora del Marusia.


Una campeona del mundo, al servicio de niñas y entrenadoras


Aunque el Internacional está pensado especialmente para las gimnastas, ayer hubo una actividad muy aprovechable también para las entrenadoras. Fue la visita de una campeona del mundo y de Europa, la rusa Yana Lukonina, que actualmente ejerce como técnica de la selección rusa y jueza internacional.

Con la exgimnasta olímpica ourensana Marta Bobo como maestra de ceremonias, Lukoniva se esmeró en trasmitir sus conocimientos, técnicas de entrenamiento, consejos y experiencias en una master class de una deportista de acreditada experiencia y éxitos contrastados.

Durante toda la mañana, la rusa se implicó al máximo en indicar y trabajar con las niñas, marcar los ejercicios o ayudar en los estiramientos.
Un lujo para las asistentes solo horas antes de clausurar esta séptima edición del Torneo Internacional de gimnasia rítmica que volverá en 12 meses con aún mayor ambición.

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