Una prueba para valientes. Es la única forma de describir la Spain Backyard Ultra que se disputó en Castro Caldelas. El mecanismo de competición consistió en dar una vuelta cada hora a un circuito de 6,7 kilómetros, de forma continuada. El corredor que no complete una vuelta en esos 60 minutos quedó eliminado, y los demás continuaron esa misma secuencia en las siguientes horas hasta que un solo atleta en carrera consiguiera completar la última vuelta en una hora.
Y ese fue Simon Gfeller. El suizo afincando en Málaga, dio una exhibición y consiguió recorrer 157 kilómetros ininterrumpidos durante las 23 horas que estuvo corriendo.
Por detrás, el segundo lugar fue para Fernando Soriano, que terminó cediendo en el mano a mano con vencedor. La tercera plaza fue para José Ángel Díaz, que dio la sorpresa quedando por delante de otros especialistas con mucha más experiencia en las citas de larga distancia.
