Una medalla de chocolate no sabe mal

De menos a más hasta firmar una cuarta posición en un Campeonato del Mundo. La aventura británica de los ourensanos Javier Valencia y Pablo Barata con la selección española de hockey hierba en la categoría +40 años ha dejado unas muy buenas sensaciones, a pesar de que demostraron que incluso podían optar a algo más. “Se nos escapó el último partido ante Irlanda (derrota por 1-0), porque tuvimos 10 penaltis córner, pero en líneas generales ha sido un buen Mundial”, destaca Javier Valencia, todo un veterano (no por la edad) en eventos de este nivel, pues ya fue subcampeón mundial en la cita de Terrassa. Los Red Sticks +40 reaccionaron a la derrota inicial ante Malasia (2-4) para superar en la fase de grupos a Italia (11-0), Escocia (3-2), Estados Unidos (1-0) y Argentina (3-0), aunque cedieron frente a una Australia (2-1) que se quedó con la primera plaza del grupo y que logró elpase a la final. Después, en la lucha por el bronce llegó la ya reseñada derrota ante Irlanda. “Malasia tiene un juego muy anárquico. Su sistema 5-5, tan diferente al hockey europeo, nos penalizó y esa derrota que arrastramos en toda la fase de grupos nos condicionó, porque ante Australia podría habernos llegado un empate para llegar a la final. Precisamente ante los australianos hicimos un gran partido. Empezamos ganando y en el tramo final decidieron”, añade Valencia. Así, con la segunda plaza del grupo tras cuatro victorias y dos derrotas, a España le tocó jugar el duelo por el tercer puesto ante la segunda del otro grupo, en el que dominó la anfitriona Inglaterra. La final vivió un encuentro muy igualado, tanto que después del empate a dos en el tiempo reglamentario se decidió en los shoot outs. Ahí los locales se impusieron por 3-1 para quedarse con el título mundial. EN 2023 EL EUROPEO Después de “una nueva experiencia internacional”, a los ourensanos ya solo les queda mirar a la siguiente gran cita con España, el Europeo 2023, aún sin sede.