¿Cómo ahorrar combustible?

Repostaje en una gasolinera de la ciudad. (ÓSCAR PINAL)
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Los mejores consejos para ahorrar combustible cuando conduces con tu coche

No son tiempos sencillos para tener un coche y repostar prácticamente todas las semanas. Los precios de los combustibles está complicando el día a día de los conductores, que buscan métodos para ahorrar unos litros que les permitan estirar el tiempo entre llenado y llenado.

A pesar de la eficiencia de los nuevos modelos y de la irrupción de los híbridos y eléctricos, el diésel y la gasolina siguen siendo los combustibles más utilizados, que ahora mismo se mueven en valores próximos a los 2 euros, superándolos en algunos momentos.

Por eso, es importante conocer algunas recomendaciones que permitirán alargar el depósito y que sencillamente requieren unos cambios de hábitos.

Arranque en frío

Muchos conductores tienen dos hábitos negativos para el vehículo y el consumo. El primero, iniciar la marcha justo a continuación de encender el vehículo sin dejar que lubrique todas las partes de forma correcta. El segundo, que afecta al consumo, los acelerones cuando está frío para que tome temperatura, algo que no funciona y que solo hace gastar combustible.

Las marchas

Cuanto más alta, mejor. Es un consejo clásico, pero los coches consumen menos cuanto más largo es el desarrollo de la marcha, por lo que evita circular mucho tiempo en primera y segunda. En un diésel a partir de 1.500 vueltas hay par, por lo que ya se puede cambiar. En un gasolina algo más.

El start&stop

Es cierto que a veces puede resultar desquiciante, pero su uso de manera inteligente ahorra mucho combustible. Un vehículo consume más de un litro al ralentí, así que cada vez que se apague, piensa en el ahorro.

Aprovechar inercia

Otro de los consejos inútiles y peligrosos es el de “circular en punto muerto en las bajadas”. Al margen de que es una temeridad, el ahorro es mínimo. Por ello, es importante aprovechar la inercia del vehículo, aunque en una marcha larga. También los nuevos modelos tienen sistemas de desconexión de cilindros, que reducen consumos.

Ventanillas subidas

Llevar las ventanillas del coche abiertas genera una mayor resistencia al aire durante la conducción y aumenta de manera considerable el consumo, ya que al vehículo le cuesta más avanzar.

Aire acondicionado

Con mesura. No solo por la salud de los ocupantes, también porque aumenta el consumo, lo mismo que la calefacción. Todo en su justa medida y si en algún momento se puede llevar apagada, pues mejor.

Las ruedas

El buen estado de los neumáticos, tanto en desgaste como en presiones, ayuda a reducir los consumos. Al margen del ahorro, es clave que el único elemento en contacto con la carretera tenga buena salud, ya que de ello depende la estabilidad y adherencia del vehículo.

No estresarse

Como todo en la vida, los nervios no son buenos consejeros. La conducción agresiva no ayuda a reducir el consumo de carburante, todo lo contrario. Es muy importante conducir relajado y sin prisas. La planificación de los viajes para evitar imprevistos siempre ayuda a reducir consumos.

El peso

Por cada 50 kilos extra, el consumo aumenta un 2,5%, así que si no vas a usar algo, no lo lleves en el maletero.

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