La emoción que transmiten ciertas imágenes en los rallys van más allá de la velocidad. En el pasado Ypres Rally, que este año debutó en el campeonato del Mundo, Philippe Baffoun y su copiloto Charlyne Quartine se salieron de la carretera precipitándose a una de las habituales zanjas belgas.
A pesar de los esfuerzos, los aficionados no eran capaces de sacarlo del agujero hasta que un grupo de aficionados asturianos y cántabros tomaron las riendas. Después de consultar con el equipo si podía cambiar de estrategia y tras un momento cómico debido a la temperatura de los frenos del Alpine "engánchalo tú que quema", comenzaron a tirar con dos eslingas y con la ayuda del propio piloto lo consiguieron para alegría de todos los presentes.
Y si bien es cierto que perdieron bastante tiempo, cumplieron el objetivo principal, completar la prueba en el puesto 38 de la general.