José Antonio F.A. fue condenado a dos años de prisión por agredir con un palo de hockey a un vecino suyo que le molestaba por las noches porque hacía ruido. También debe abonarle 3.091 euros por las secuelas causadas con el golpe, tanto en la oreja como en el antebrazo.
Los hechos que fueron sentenciados por el Juzgado Penal 1 sucedieron el 19 de agosto del pasado año cuando José Antonio F.A. se encontró con un vecino en la escalera del inmueble, donde ambos conviven en el municipio de Verín. El inculpado recriminó al denunciante que hacía ruido por las noches, lo que dio paso a una discusión. Esta última se elevó de tono cuando el acusado golpeó al perjudicado con un palo de hockey en la oreja derecha y el antebrazo derecho.
Secuelas
La víctima de la agresión fue reconocida por el forense que constató la existencia de la herida en la oreja, escoriaciones y hematomas en el brazo. Necesitó para su curación tratamiento médico y nueve puntos de sutura. La herida le dejó secuelas: una cicatriz de tres centímetros en el pabellón auricular derecho.
El inculpado el día del juicio admitió los hechos y la fiscalía rebajó en seis meses la condena inicialmente prevista al igual que la acusación particular. Los hechos fueron calificados como un delito de lesiones con instrumento peligroso. La misma sentencia suspende el ingreso en prisión siempre que no delinca de nuevo.
