Ha sido el primer gran incendio del verano en Galicia, y mantuvo en vilo de madrugada a vecinos de cinco aldeas, tras quedarse sin luz ni agua
El incendio declarado pasadas las tres de la tarde del jueves en Vilamaior (Verín) ya llevaba calcinadas en la noche de ayer 1.360 hectáreas de monte raso y arbolado –mayoritariamente pinos, mimosas, eucaliptos y robles–. De la superficie carbonizada, alrededor de 300 hectáreas habían sido repobladas por comuneros de Verín y Vilardevós, en colaboración con Medio Rural, para paliar los efectos de incendios registrados en años anteriores en la misma zona. El fuego, según la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, se inició en una de estas reforestaciones, a escasa distancia del santuario de Os Remedios (Verín) y la base del helicóptero antiincendios.
Los efectivos, 400 trabajadores, entre los que estaban ayer efectivos de la Unidad de Emergencias (UME) del Ejército de Tierra, apoyados desde el aire por 17 aeronaves y por tierra por 29 coches motobomba, lograban en la tarde de ayer acotar el fuego (ardía solo en la zona ya carbonizada sin propagarse), pero Medio Rural aún no lo daba por controlado. La propia Ángeles Vázquez, que recorrió la zona afectada acompañada del vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, mantenía todos los efectivos en el lugar, ante el riesgo de que algunos focos se reavivasen y se propagasen.
Fuego intencionado
La titular de Medio Rural explicó que el incendio fue intencionado y apeló a la responsabilidad de la población para denunciar a los incendiarios. "Tres de cuatro incendios que se registran en Galicia son intencionados", afirmó, puntualizando que las llamas calcinaron un coche motobomba, cuyo conductor resultó ileso.
También se desplazaron a la zona ardida el delegado en Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva (es natural de la comarca), que estuvo acompañado del secretario de la Subdelegación en Ourense, Manuel Arias.
Las llamas obligaron a cortar durante más de ocho horas la circulación en la autovía Rías Baixas y la carretera N-525. El cierre afectó a un tramo de más de tres kilómetros en Fumaces.
Humo en Castilla y León
La circulación quedó restablecida sobre las dos de la madrugada de ayer, aunque varias patrullas de Tráfico aún recomendaban a los conductores por la mañana circular con precaución, dada la densa humareda que desprendían los árboles carbonizados y los troncos que continuaban ardiendo. La humareda que generó el incendio llegó hasta las ciudades de Valladolid, Palencia y Segovia, cubriendo el casco urbano de estas ciudades, según dio a conocer el Servicio de Emergencias de Castilla-León, que activó el aviso por contaminación.
Personal municipal de Verín reparaba en la jornada de ayer los desperfectos que ocasionaron las llamas en el sistema de captación y depósito del abastecimiento de agua a los vecinos de Queirugás. "O lume deixou o pobo sin agua no depósito", aseguró un vecino.
Al mismo tiempo, varias brigadas de Gas Natural Fenosa reponían transformadores de corriente e infraestructura afectados por el fuego en los distintos tendidos eléctricos, para poder restablecer el suministro eléctrico en todas las viviendas y vías públicas afectadas. "A mayoría dos veciños quedaron sin luz, pero pouco a pouco se está restablecento o servizo", apuntó ayer por la tarde el alcalde de Verín, Gerardo Seoane.
Gran fuego
Este el primer gran incendio del verano en Galicia, que mantuvo en alerta toda la madrugada a los vecinos de Osoño, Fraira, A Devesa y Hospital (Vilardevós) y Queirugás (Verín). Los bomberos de Verín tuvieron que intervenir, junto con los brigadistas, hasta en 10 ocasiones al llegar el fuego a viviendas. A la extinción se sumaron bomberos del parque de Xinzo, Protección Civil y el Grupo de Intervención de Laza, además de la BRIF.
