Los expositores lamentan la menor asistencia de público respecto al 2015
La segunda edición de la Feira do Outono de Verín no tuvo el tirón esperado por los organizadores. Las desapacibles condiciones climatológicas reinantes durante todo el fin de semana perjudicaron en gran medida la asistencia de público. Los propios expositores consultados coinciden al señalar que el factor ambiental supuso un importante hándicap a sus ventas, aunque aún así se consideran satisfechos tanto de la afluencia como del negocio realizado.
La mañana de ayer domingo, al igual que en el resto de la provincia, amaneció en Verín con importantes lluvias que terminaron ahuyentando a los visitantes. La tarde ligeramente apacible permitió que se incrementasen el número de visitas, que se apreció en el concurso de cocina y el sorteo de la cesta elaborada con productos de los diferentes puestos de venta.
Haciendo balance, y pese a la menor afluencia respecto a 2015, la edil responsable de la organización, Purificación Caldelas, se mostraba en el día de ayer "satisfecha" de los resultados, sobre todo de aquellas iniciativas novedosas que en esta segunda edición se pusieron en marcha. "Funcionou o curso de micoloxía, que aínda que comezou con pouca xente logo foise animando, e por suposto a cata de mel que tivo lugar o sábado en na que tamén participaron unhas vinte persoas", explicó Caldelas Rodríguez.
La banda de gaitas del Concello de Verín animó gran parte de la tarde de ayer, dando paso, pasadas las 20,30 horas, al sorteo final de la cesta, en el que pudieron particiar los asistentes que compraron algún producto en la feria.
