Los arrestados son un vecino, su hijo y su nieto y se golpearon con una azada y una horquilla

Tres miembros de una familia de Monterrei, detenidos por agredirse tras una discusión

Un vecino de la localidad de Medeiros (Monterrei), su hijo y su nieto fueron detenidos ayer como presuntos autores de un delito de lesiones. Los arrestados se agredieron con una azada y una horquilla durante una discusión por diferencias en los accesos a sus domicilios, que están prácticamente juntos. Durante la reyerta, el padre golpeó con una azada a su hijo y éste le clavó la horquilla en un brazo. Ambos fueron atendidos en el Hospital de Verín y quedaron en libertad con cargos tras declarar en el Juzgado.
La Guardia Civil detuvo a tres miembros de una misma familia -un vecino de Medeiros (Monterrei), su hijo y su nieto- como presuntos autores de un delito de lesiones después de que se pelearan por diferencias en el paso de acceso a sus domicilios, que están prácticamente juntos.

La reyerta se desencadenó el pasado 5 de febrero cuando Adolfo C.F., de 76 años, y su hijo, Sergio C.A., de 45, se encontraron en la calle, a escasos metros de sus respectivas viviendas, y comenzaron a dis cutir y amenazarse. Un vecino intentó mediar en el enfrentamiento pero ambos hombres, lejos de calmarse, se armaron para seguir con la pelea. El primero echó mano de una azada, con la que golpeó a su hijo, y éste, que estaba en compañía de su hijo, Daniel C.D., de 22 años, de una horquilla que clavó a su padre en un brazo.

Daniel C.D., junto con varios vecinos logró separar a su padre y a su abuelo, que fueron trasladados al Hospital de Verín, para ser atendidos de heridas inciso contusas y punzantes en diferentes partes del cuerpo.

Tras ser dados de alta, la Guardia Civil procedió a su detención, aunque quedaron en libertad con cargos después de prestar declaración en el Juzgado de Instrucción número 2 de Verín.

Los dos hombres mantenían en la actualidad una buena relación y aparentemente no tenían ningún problema. Ambos retomaron su amistad, según fuentes de la Guardia Civil, después de que no se hablarán por diferencias en los accesos a sus respectivos domicilios y una finca, aunque en aquella ocasión no llegaron a las manos ni a formular denuncia en el Juzgado.

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