Se manifestaron ante sus oficinas en Campobecerros para exigir el arreglo de la carretera
Con el expresivo lema "Esto clama ao ceo", 150 vecinos de las aldeas más montañosas del Concello de Castrelo do Val salieron ayer a la carretera que los comunica con el valle, la OU-114, para protestar en manifestación por los destrozos que las obras de la entrada de la Alta Velocidad en Galicia están provocando no solo en las vías provinciales y autonómicas, sino también en las de titularidad municipal.
Acompañados incluso por dos diputados ourensanos en el Parlamento gallego, como lo son el socialista Raúl Fernández Fernández y Noa Presas, del Bloque Nacionalista Galego, y con el alcalde del municipio detrás pero en el centro de la pancarta, Vicente Gómez; habitantes perjudicados, autoridades y representantes públicos recorrieron un par de kilómetros desde el cruce del desvío a la localidad de Veiga de Nostre hasta las oficinas que Adif posee en la antigua estación de tren de Campobecerros. La marcha coincidió con el inicio del acondicionamiento anunciado por el ente gestor de los ferrocarriles, aunque Gómez considera que "os traballos que están a facer, de simple bacheado, e ademáis misturando formigón con asfalto, non resolverán o problema que eles mesmo xeraron. E digo máis, algunha solución terán que facilitar para as estradas municipais se non queren que saimos de novo".
