El Tribunal de Apelación de Milán accedió ayer a la petición del expresidente del Gobierno italiano Silvio Berlusconi de aplazar hasta el próximo 1 de marzo la audiencia del proceso en el que está imputado por un delito de fraude fiscal en el llamado caso Mediaset.
De esta manera, Berlusconi logró posponer hasta después de las elecciones las vistas de los procesos que tiene pendientes alegando para convencer a los jueces la imposibilidad de él y de sus abogados de acudir a las audiencias debido a los compromisos de campaña.
Berlusconi concurre a las elecciones previstas para el 24 y 25 de febrero como líder de una coalición de centroderecha, mientras que sus abogados, Piero Longo y Niccolo' Ghedini, que son parlamentarios, vuelven a figurar en las listas electorales.
El 18 de enero comenzó el proceso de apelación después de que el pasado octubre Berlusconi fuese condenado a 4 años de prisión, que se quedaron en un año de reclusión por la llamada ley del indulto, y a la prohibición de desempeñar un cargo público durante 3 años, por ser culpable de fraude fiscal.
En una primera vista, los jueces de Milán rechazaron la petición de los abogados de Berlusconi de aplazar el proceso, pero ayer accedieron a la suspensión ante la ausencia del expresidente del Gobierno y de sus dos abogados debido a su participación en programas televisivos. De esta manera, los jueces suspendieron las vistas previstas para el 15 y 22 de febrero por lo que este juicio continuará el 1 de marzo, cuando está previsto el alegato del fiscal y se prevé que quede visto para sentencia el 23 de marzo. Los letrados de Berlusconi pidieron la suspensión de todas las audiencias celebradas desde que comenzó esta campaña electoral alegando el 'legítimo impedimento'.
Hace algunas semanas, los jueces ya decidieron aplazar por este motivo al 7 de marzo la sentencia sobre Berlusconi por el llamado caso Unipol, por la publicación de escuchas telefónicas de procedencia ilícita en el diario 'Il Giornale', propiedad de su hermano Paolo.
Aunque continúa el tercer juicio, el llamado caso Ruby, en el que esta acusado por abuso de poder y prostitución de menores, los jueces sí concedieron aplazar la sentencia hasta el 11 de marzo.
Berlusconi concurre a las elecciones previstas para el 24 y 25 de febrero como líder de una coalición de centroderecha, mientras que sus abogados, Piero Longo y Niccolo' Ghedini, que son parlamentarios, vuelven a figurar en las listas electorales.
El 18 de enero comenzó el proceso de apelación después de que el pasado octubre Berlusconi fuese condenado a 4 años de prisión, que se quedaron en un año de reclusión por la llamada ley del indulto, y a la prohibición de desempeñar un cargo público durante 3 años, por ser culpable de fraude fiscal.
En una primera vista, los jueces de Milán rechazaron la petición de los abogados de Berlusconi de aplazar el proceso, pero ayer accedieron a la suspensión ante la ausencia del expresidente del Gobierno y de sus dos abogados debido a su participación en programas televisivos. De esta manera, los jueces suspendieron las vistas previstas para el 15 y 22 de febrero por lo que este juicio continuará el 1 de marzo, cuando está previsto el alegato del fiscal y se prevé que quede visto para sentencia el 23 de marzo. Los letrados de Berlusconi pidieron la suspensión de todas las audiencias celebradas desde que comenzó esta campaña electoral alegando el 'legítimo impedimento'.
Hace algunas semanas, los jueces ya decidieron aplazar por este motivo al 7 de marzo la sentencia sobre Berlusconi por el llamado caso Unipol, por la publicación de escuchas telefónicas de procedencia ilícita en el diario 'Il Giornale', propiedad de su hermano Paolo.
Aunque continúa el tercer juicio, el llamado caso Ruby, en el que esta acusado por abuso de poder y prostitución de menores, los jueces sí concedieron aplazar la sentencia hasta el 11 de marzo.
