Un tribunal de justicia de El Salvador condenó a 159 años de cárcel a una mujer y dos pandilleros por el asesinato en 2010 del esposo y los suegros de ella, uno de estos español, informó hoy una fuente judicial.
El Juzgado Especializado de Sentencia B de San Salvador dictó el viernes sendas condenas de 53 años de prisión a Evelyn Hernández de Torres y los pandilleros Marvin Rodríguez y Carlos Mejía, todos salvadoreños, dijo a Efe un portavoz de los tribunales de justicia.
La pena máxima en El Salvador es de 60 años.
Hernández de Torres es acusada de ser la autora intelectual del asesinato de su esposo y sus suegros, ejecutado por los pandilleros el 20 de junio de 2010 en la vivienda familiar en Santa Tecla (centro), aledaña a San Salvador.
La mujer fue extraditada el 19 de enero desde España, a donde se fue semanas después del triple crimen, que según las autoridades salvadoreñas ella planificó para quedarse con unos 700.000 dólares y bienes del patrimonio familiar.
Según la Fiscalía, Hernández de Torres facilitó los medios para que los pandilleros mataran a su esposo, José Antonio Torres, de 58 años, y a sus suegros, el español Manuel Torres (80) y la salvadoreña María Galdámez (74).
José Antonio Torres nació en El Salvador pero también tenía la nacionalidad española por su padre.
La Policía y la Fiscalía, que desde un principio sospecharon de Hernández de Torres, establecieron que ella contrató a través de un intermediario a los pandilleros, al parecer por unos 15.000 dólares.
Casi un mes después de los asesinatos, el 8 de julio de 2010, Hernández de Torres viajó hacia Galicia, de donde era originario su suegro.
Sin embargo, fue detenida el 9 de diciembre de 2010 por la Policía española en Orense, tras una petición de las autoridades de El Salvador cursada a través de la Policía Internacional (Interpol).
Finalmente, la Audiencia Nacional de España aprobó en 2011 la extradición de Hernández de Torres, que se concretó el 19 de enero de este año.
La pena máxima en El Salvador es de 60 años.
Hernández de Torres es acusada de ser la autora intelectual del asesinato de su esposo y sus suegros, ejecutado por los pandilleros el 20 de junio de 2010 en la vivienda familiar en Santa Tecla (centro), aledaña a San Salvador.
La mujer fue extraditada el 19 de enero desde España, a donde se fue semanas después del triple crimen, que según las autoridades salvadoreñas ella planificó para quedarse con unos 700.000 dólares y bienes del patrimonio familiar.
Según la Fiscalía, Hernández de Torres facilitó los medios para que los pandilleros mataran a su esposo, José Antonio Torres, de 58 años, y a sus suegros, el español Manuel Torres (80) y la salvadoreña María Galdámez (74).
José Antonio Torres nació en El Salvador pero también tenía la nacionalidad española por su padre.
La Policía y la Fiscalía, que desde un principio sospecharon de Hernández de Torres, establecieron que ella contrató a través de un intermediario a los pandilleros, al parecer por unos 15.000 dólares.
Casi un mes después de los asesinatos, el 8 de julio de 2010, Hernández de Torres viajó hacia Galicia, de donde era originario su suegro.
Sin embargo, fue detenida el 9 de diciembre de 2010 por la Policía española en Orense, tras una petición de las autoridades de El Salvador cursada a través de la Policía Internacional (Interpol).
Finalmente, la Audiencia Nacional de España aprobó en 2011 la extradición de Hernández de Torres, que se concretó el 19 de enero de este año.
