Un español residente en Nueva Zelanda es una de las personas que han fallecido por el terremoto que tuvo lugar el martes en ese país. El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación informó de que las autoridades neozelandesas informaron a las españolas de que su cadáver fue encontrado en la localidad de Christchurch, mientras que el embajador en Wellington, Marcos Gómez, ya se ha puesto en contacto con sus familiares. Su identidad no ha sido revelada. Por otro lado, un hombre de 52 años fue rescatado en Christchurch tras amputarle los médicos las dos piernas con una navaja suiza.
El departamento ministerial que dirige Trinidad Jiménez informó de que un español es uno de los por ahora 113 fallecidos contabilizados en el terremoto que tuvo lugar este martes en la ciudad de Chrischurch. En el registro consular de la Embajada figuran inscritos otros 17 españoles a los que no se ha podido localizar, pero ningún familiar o allegado ha alertado de su desaparición ni se encuentran en la lista de víctimas elaborada por las autoridades neozelandesas. Portavoces del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación creen que, simplemente, ya no residen allí.
El departamento no informó de la identidad del fallecido ni de otros datos personales como su edad profesión o ciudad originaria en España. Los familiares ya han sido contactados por el embajador en Wellington, Marcos Gómez.
Por otro lado, los equipos de rescate destinados en Christchurch tras el terremoto del martes han conseguido rescatar con vida a un hombre atrapado entre los escombros, al que se han visto obligados a amputarle las piernas con una navaja suiza. En el jueves, el número total de muertos por el seísmo se ha fijado en 113.
El departamento no informó de la identidad del fallecido ni de otros datos personales como su edad profesión o ciudad originaria en España. Los familiares ya han sido contactados por el embajador en Wellington, Marcos Gómez.
Por otro lado, los equipos de rescate destinados en Christchurch tras el terremoto del martes han conseguido rescatar con vida a un hombre atrapado entre los escombros, al que se han visto obligados a amputarle las piernas con una navaja suiza. En el jueves, el número total de muertos por el seísmo se ha fijado en 113.
