Un artefacto explosivo estalló la pasada madrugada delante de una sede de la entidad pública de recaudación de impuestos italiana, Equitalia, en Verona (norte del país) sin que se produjeran daños graves ni víctimas, mientras que otro fue hallado por la policía sin explotar en el mismo lugar.
Las primeras investigaciones sobre el artefacto que explotó anoche han revelado que fue confeccionado con pólvora negra, aunque la policía científica italiana realizará los exámenes químicos correspondientes que confirmen su composición y que determinen la procedencia del mismo, según informaron los medios italianos.
El incendio provocado por la explosión de la bomba en la puerta de la sede de Equitalia, que estaba cerrada por tratarse de horario nocturno, finalizó antes de la llegada de los bomberos, que recibieron el aviso alrededor de las tres y media de la madrugada y acordonaron la zona a su llegada.
La policía intentará ahora llegar hasta el responsable de los hechos gracias a las pruebas obtenidas en esta oficina, situada en las afueras de Verona, y al análisis del artefacto que no explotó por un fallo del detonador, según estas mismas fuentes.
No es la primera ocasión que Equitalia sufre un ataque de este estilo: la Federación Anarquista Informal (FAI) reivindicó en diciembre del año pasado el envío de un paquete bomba en Roma al director general de Equitalia, Marco Cuccagna, cuya deflagración le causó heridas en la cara y en la mano, y a lo largo de 2012 se han producido varios ataques a sedes de este organismo en toda Italia.
El incendio provocado por la explosión de la bomba en la puerta de la sede de Equitalia, que estaba cerrada por tratarse de horario nocturno, finalizó antes de la llegada de los bomberos, que recibieron el aviso alrededor de las tres y media de la madrugada y acordonaron la zona a su llegada.
La policía intentará ahora llegar hasta el responsable de los hechos gracias a las pruebas obtenidas en esta oficina, situada en las afueras de Verona, y al análisis del artefacto que no explotó por un fallo del detonador, según estas mismas fuentes.
No es la primera ocasión que Equitalia sufre un ataque de este estilo: la Federación Anarquista Informal (FAI) reivindicó en diciembre del año pasado el envío de un paquete bomba en Roma al director general de Equitalia, Marco Cuccagna, cuya deflagración le causó heridas en la cara y en la mano, y a lo largo de 2012 se han producido varios ataques a sedes de este organismo en toda Italia.
