El Gobierno ha condenado hoy el 'brutal' atentado perpetrado en Mogadiscio (Somalia) en el que al menos 70 personas han perdido la vida y ha reiterado su compromiso con la paz, el desarrollo y la estabilidad del país.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha lamentado 'profundamente' la pérdida de vidas humanas y ha informado de que seguirá apoyando a la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM) y al Gobierno Federal de Transición somalí, especialmente en este momento de grave crisis alimentaria.
Al menos 70 personas han fallecido y más de 50 han resultado heridas en un atentado suicida perpetrado en un complejo de edificios en el centro de Mogadiscio, donde tienen sus oficinas tres ministerios del Gobierno Federal de Transición de Somalia (TFG, en inglés).
La mayoría de los muertos eran estudiantes que habían acudido a los distintos ministerios a examinarse o a cursos que se imparten en estos edificios, así como miembros de la Administración.
Somalia vive una permanente guerra civil y carece de un Gobierno efectivo desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país en manos de señores de la guerra tribales, milicias islámicas y bandas de delincuentes armados.
