Con incidentes finalizó ayer la marcha que agrupaciones de derechos humanos, estudiantes y dirigentes políticos realizaron hasta el memorial del Cementerio General de la capital chilena, al conmemorarse ayer 38 años del golpe militar de 1973. Organizada por la Asamblea Nacional de Derechos Humanos, quién cifró en más de cinco mil las personas que desfilaron hasta el principal camposanto, la marcha partió desde La Plaza de Los Héroes, a cuatro manzanas de la sede del Ejecutivo y llegó en absoluta calma hasta el lugar.
En el frontis del cementerio cuando los dirigentes hacían uso de la palabra, unos 150 encapuchados atacaron con piedras y otros objetos a Carabineros que estaban apostados en el lugar. La policía usó mangueras y bombas lacrimógenas para disolver a los manifestantes que causaron destrozos, una situación que ya se dio en otros años. Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, señaló que con la llegada a la presidencia del derechista Sebastián Piñera hubo un retroceso en las investigaciones sobre lo ocurrido en la dictadura de Pinochet (1970-1973).
Mientras se hacía el acto en el cementerio, políticos del Partido Socialista y del Comunista colocaron ofrendas florales en el monumento al presidente Salvador Allende en la Plaza de La Constitución.
Mientras se hacía el acto en el cementerio, políticos del Partido Socialista y del Comunista colocaron ofrendas florales en el monumento al presidente Salvador Allende en la Plaza de La Constitución.
