Diecisiete trabajadores de una obra pública murieron hoy en el extremo norte de la India tras precipitarse desde casi 70 metros de altura el vehículo en el que viajaban, informó a Efe una fuente policial.
'Aún no sabemos las causas exactas del siniestro, pero todo apunta a la intensa nevada que caía en ese momento, que podría haber provocado que el conductor perdiera el control al salir de una curva', precisó la responsable de policía del distrito, Vina Bharti.
Según esta fuente, un niño de cinco años está entre los muertos en el accidente, que también dejó a dos personas heridas.
El siniestro ocurrió en el distrito de Kinnaur, situado en el estado de Himachal Pradesh, y los fallecidos trabajaban en el mantenimiento de las carreteras que conectan el Himalaya indio con la vecina China.
Las víctimas eran originarias de los estados de Bihar y Jarkhand, ubicados en el oeste del país y que se cuentan entre los más depauperados de la India.
La carretera en la que ocurrió el accidente no ha sido cerrada al tráfico, pero según la superintendente Bharti 'se van a estudiar bien las causas para evitar en lo posible que vuelva a pasar algo parecido'.
Según un informe de 2011 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), unas 125.000 personas mueren anualmente en las carreteras indias, lo que las convierte en las más mortíferas del mundo.
El elevado número de víctimas se debe en parte al precario estado de las carreteras del país, por las que circulan a menudo vehículos sobrecargados de pasajeros.
