El líder de la oposición en Zimbabue, Morgan Tsvangirai y el presidente Robert Mugabe llegaron a un acuerdo para compartir el poder que, según informó el presidente de Sudáfrica, Thabo Mbeki, será firmado y se hará público el lunes, después de ejercer como intermediario entre ambos rivales durante cuatro días de conversaciones en Harare.
'Estoy absolutamente seguro de que los líderes en Zimbabue están comprometidos a poner en marcha los acuerdos', dijo Mbeki
El mandatario sudafricano no dio detalles sobre el acuerdo y aunque Tsvangirai confirmó el arreglo, Mugabe aún no ha hecho comentario alguno.
El acuerdo abre el camino para que los donadores internacionales ayuden a revivir la maltrecha economía de Zimbabue que es la más golpeada del planeta con una inflación galopante.
El gobierno y el opositor Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), ya habían acordado que Tsvangirai fuera nombrado primer ministro y que Mugabe quedara en su puesto como presidente.
Las negociaciones han sido intermitentes desde finales de julio, pero se estancaron a la hora de decidir la forma de repartir el poder ejecutivo entre los antiguos rivales.
Asimismo, había conflicto por el número de ministros que cada partido debía de tener en un gobierno de unidad y por cuanto poder podría retener Mugabe.
'Ambos partidos estamos comprometidos. Deseamos que el acuerdo sea un éxito', dijo a la BBC Nelson Chamisa, portavoz del MDC.
Robert Mugabe está en el poder desde que Zimbabue se independizó del Reino Unido en 1980. En junio pasado ganó la segunda vuelta de una controvertida elección presidencial sin oposición, después de que Tsvangirai se retirara argumentando que el MDC era el blanco de violencia por parte del gobierno.
En la primera vuelta -en marzo- Tzvangirai obtuvo más votos que Mugabe, pero los resultados oficiales no daban más del 50 por ciento de los necesarios para clamar la victoria.
Al tomar como referencia las elecciones de marzo, Tsvangirai exigía la jefatura del gobierno y liderar las reuniones del gabinete, dejando a Mugabe en una posición ornamental.
El mandatario sudafricano no dio detalles sobre el acuerdo y aunque Tsvangirai confirmó el arreglo, Mugabe aún no ha hecho comentario alguno.
El acuerdo abre el camino para que los donadores internacionales ayuden a revivir la maltrecha economía de Zimbabue que es la más golpeada del planeta con una inflación galopante.
El gobierno y el opositor Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), ya habían acordado que Tsvangirai fuera nombrado primer ministro y que Mugabe quedara en su puesto como presidente.
Las negociaciones han sido intermitentes desde finales de julio, pero se estancaron a la hora de decidir la forma de repartir el poder ejecutivo entre los antiguos rivales.
Asimismo, había conflicto por el número de ministros que cada partido debía de tener en un gobierno de unidad y por cuanto poder podría retener Mugabe.
'Ambos partidos estamos comprometidos. Deseamos que el acuerdo sea un éxito', dijo a la BBC Nelson Chamisa, portavoz del MDC.
Robert Mugabe está en el poder desde que Zimbabue se independizó del Reino Unido en 1980. En junio pasado ganó la segunda vuelta de una controvertida elección presidencial sin oposición, después de que Tsvangirai se retirara argumentando que el MDC era el blanco de violencia por parte del gobierno.
En la primera vuelta -en marzo- Tzvangirai obtuvo más votos que Mugabe, pero los resultados oficiales no daban más del 50 por ciento de los necesarios para clamar la victoria.
Al tomar como referencia las elecciones de marzo, Tsvangirai exigía la jefatura del gobierno y liderar las reuniones del gabinete, dejando a Mugabe en una posición ornamental.
