Una de las ollas a presión utilizadas en el atentado tras el maratón era de la marca española Fagor

La policía de Boston identifica a un sospechoso de los ataques

Una mujer llora ante varias ofrendas en la avenida Boylston, en Boston. (Foto: J. LANE)
El FBI y la policía de Boston podrían haber identificado ayer al primer sospechoso de los atentados de Boston, aunque negaron que se hubiera producido ningún aresto en relación a los ataques cometidos en la carrera de maratón.
'A pesar de informes ampliamente difundidos sobre lo contrario, no ha habido un arresto en conexión con el ataque de la maratón de Boston', informó la Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) en un comunicado en el que sin embargo no negaban estar en posesión de imágenes en las que podía haberse identificado a uno de los sospechosos de los atentados.

La cadena CNN desmintió que se hubiera producido un arresto poco después de informar del mismo, mientras que el diario Boston Globe también indicó ayer que había un sospechoso bajo custodia de las autoridades. Los informes llegaron poco después de otros que afirmaban que las autoridades ya habían identificado a uno de los sospechosos, gracias al vídeo grabado por las cámaras de seguridad de los grandes almacenes Lord & Table y las imágenes proporcionadas por una cadena de televisión local. Dichas imágenes muestran 'a un sospechoso trasladando una bolsa negra, y posiblemente depositándola en la escena de la segunda bomba', informó el Boston Globe, que cita a un funcionario cercano a la investigación.


RESTOS DE LOS ARTEFACTOS

Mientras, los investigadores que están reconstruyendo los dispositivos utilizados en los dos atentados cometidos en Boston han identificado uno de ellos como una olla a presión de la marca española Fagor, cuyo coste en el mercado local ronda los 140 dólares (alrededor de los 107 euros). Según los investigadores del FBI, el recipiente que contuvo la bomba, del que se han encontrado diversos restos retorcidos, es una olla a presión con mango de plástico de dicha marca.

Los restos de la olla, junto con jirones de la mochila negra en la que supuestamente se ocultó y un circuito integrado, baterías y cables del dispositivo, fueron enviados a los laboratorios del FBI en Quantico (Virginia) para su análisis a fondo. La tapa de la olla supuestamente utilizada como bomba fue encontrada en la azotea de un edificio cercano al sitio donde se produjo una de las explosiones.

El modelo de olla tiene una capacidad de seis litros, y en su interior se colocaron al parecer los componentes detonantes y metralla compuesta de clavos, rodamientos y otros trozos de metal para causar el mayor daño posible.

Este tipo de bomba improvisada es uno de los preferidos de los militantes de la organización terrorista Al Qaeda y ha sido empleado en numeros atentados en Oriente Medio, el norte de África o el Sureste Asiático.

El recurso a la olla a presión figuraba en uno de los números de la publicación digital 'Inspire', vinculada al grupo terrorista Al Qaeda, del verano de 2010, donde se daban instrucciones sobre 'Cómo fabricar una bomba en la cocina de tu madre'. También es una técnica muy apreciada por los grupos radicales americanos y neonazis que le han declarado la guerra al Gobierno de Washington por su pretendido control de armamento.

Te puede interesar