La Agencia británica de Inmigración será eliminada al no ser su gestión 'lo suficientemente buena' y sus funciones volverán a ser asumidas por el Ministerio de Interior, anunció hoy en el Parlamento la titular de esa cartera, Theresa May.
En una comparecencia ante la Cámara de los Comunes, May informó de que la llamada UK Border Agency (UKBA), responsable de asuntos de inmigración, control de fronteras y emisión de visados, será dividida en dos unidades separadas con funciones diferenciadas.
Uno de esos nuevos departamentos estará dedicado a gestionar los servicios de visados mientras que la otra unidad se centrará en la aplicación de la legislación en materia de inmigración.
La ministra explicó que las actividades desarrolladas por estos servicios en el futuro volverán a estar directamente controladas por el Gobierno.
Se trata de la segunda vez en menos de un año que May anuncia una división de la UKBA, organización creada en 2008, pues en 2012, la ministra ya anunció que la llamada UK Border Force -responsable de las operaciones diarias- pasaría a convertirse en un organismo independiente.
En su intervención, May dijo hoy que aquella escisión inicial demostró los beneficios de trabajar con estructuras 'más pequeñas y más centradas' si bien consideró que pese a ello la agencia continuaba sin ser 'lo suficientemente buena'.
La ministra consideró que 'el número de inmigrantes ilegales que se han expulsado del país no llegan al número de personas que se encuentran aquí de forma ilegal'.
La responsable de Interior también anunció que se creará una junta administrativa que supervisará todas las organizaciones del sistema de inmigración como el servicio de pasaportes, las políticas de inmigración, la Border Force y las dos nuevas unidades anunciadas hoy.
El anuncio se produce un día después de que un comité parlamentario de Interior criticara en un informe publicado este lunes la gestión de la UKBA y la tildara de 'inadecuada'.
Según la oposición laborista, la manera de funcionar de la Agencia 'ha empeorado, no ha mejorado' desde que el Ejecutivo de coalición llegó al poder.
Uno de esos nuevos departamentos estará dedicado a gestionar los servicios de visados mientras que la otra unidad se centrará en la aplicación de la legislación en materia de inmigración.
La ministra explicó que las actividades desarrolladas por estos servicios en el futuro volverán a estar directamente controladas por el Gobierno.
Se trata de la segunda vez en menos de un año que May anuncia una división de la UKBA, organización creada en 2008, pues en 2012, la ministra ya anunció que la llamada UK Border Force -responsable de las operaciones diarias- pasaría a convertirse en un organismo independiente.
En su intervención, May dijo hoy que aquella escisión inicial demostró los beneficios de trabajar con estructuras 'más pequeñas y más centradas' si bien consideró que pese a ello la agencia continuaba sin ser 'lo suficientemente buena'.
La ministra consideró que 'el número de inmigrantes ilegales que se han expulsado del país no llegan al número de personas que se encuentran aquí de forma ilegal'.
La responsable de Interior también anunció que se creará una junta administrativa que supervisará todas las organizaciones del sistema de inmigración como el servicio de pasaportes, las políticas de inmigración, la Border Force y las dos nuevas unidades anunciadas hoy.
El anuncio se produce un día después de que un comité parlamentario de Interior criticara en un informe publicado este lunes la gestión de la UKBA y la tildara de 'inadecuada'.
Según la oposición laborista, la manera de funcionar de la Agencia 'ha empeorado, no ha mejorado' desde que el Ejecutivo de coalición llegó al poder.
