Una de las principales arterias de la ciudad de Ourense, Progreso, parece que incorporó una nueva zona de aparcamientos a la altura del Obispado.
Ni más ni menos que cinco coches se encontraban el 8 de diciembre perfectamente mal aparcados en un carril que inutilizan, algo por otra parte común en esta ciudad. Pero claro, como es domingo, parece que casi todo está permitido.