Pagó tres millones de euros, abona las facturas a proveedores a 19 días y anuncia la congelación de tasas
El Concello de Carballiño ya está fuera del plan de ajuste económico mediante el cual en el año 2012 el Gobierno del Estado obligó a una operación de crédito para facer frente a pagos a proveedores por importe de 1.600.000 euros. A partir de ahí el Concello quedó condicionado a una serie de exigencias como la limitación a la hora de contratar personal o la imposición de la subida de varias tasas a los contribuyentes.
El alcalde, Francisco Fumega, expresaba ayer su satisfacción por haber cumplido el compromiso que había adquirido de quedar libre del plan de ajuste económico en el primer semestre de este año, con el fin de que el Concello adquiera más autonomía.
El regidor también apuntó que se han liquidado las deudas pendientes con la empresa gestora del agua, Viaqua, que ascendía a más de un millón y medio de euros; con Gas Natural - Fenosa, en torno a 800.000, entre otras, que sumaban un total de 3 millones de euros. Asimismo, señaló que en estos momentos los ingresos y gastos están totalmente equilibrados y que el promedio de pago de las facturas es de 19 días.
Todas estas mejoras afirma Fumega que se deben "á boa xestión porque nestes dous últimos anos fomos capaces de pagar as débedas e realizar os pagos nunha media de 19 días".
Todo ello va a permitir, según indicó, la congelación de las tasas que subían un 20% anual obligatoriamente, en el caso del Conservatorio y Escuela de Música, de Artes Escénicas y Deportivas, además de referirse a una mayor flexibilidad a la hora de contratar el personal necesario para mejorar los servicios.
El alcalde también señaló como dato positivo un remanente de tesorería de un millón de euros y una deuda bancaria del 26%, cuando está permitida hasta un 110%. Del superávit, anunció que está en proyecto destinar 300.000 euros a incrementar la inversión en mejoras energéticas y en las calles de la villa, entre otros destinos.
El portavoz del PP, Argimiro Marnotes, declaró que "é unha noticia xa esperada desde finais do 2015, e que desde o grupo popular celebramos que sexa definitivo". En ese sentido, añade que "temos que recordar que este plan foi aprobado no ano 2012 polo goberno do Partido Popular e valeu para que o Concello puxera un punto final ao incumprimento que era moi habitual coas pequenas e medianas empresas e autónomos que traballando para o Concello non cobraban desde facía anos". También recuerda que era un plan que finalizaría en el 2022 pero que "o Partido Popular pisou o acelerador para saír canto antes, deixando en xuño do 2015 en situación de saída do plan e que o actual goberno do PSOE tampouco deixou de lado, levándoo agora a bo fin".
El portavoz de Alternativa Veciñal, Bernardo García, también celebraba la nueva situación que "permite facer contratos dentro do que contempla a Lei de contratacións do sector público", añadiendo que "o Concello terá agora máis independencia para contratar novo persoal para mellorar e municipalizar servizos como a recaudación".
Mayor capacidad de maniobra para el ayuntamiento
“É pois unha gran noticia que mostra, en primeiro lugar, a boa xestión que estamos realizando no Concello; en segundo lugar, vainos permitir ter unha maior capacidade de maniobra con respecto ás taxas de determinados servizos que estaban suxeitos ás especificacións deste plan, e en terceiro lugar, incrementa o marxe de confianza na xestión municipal”, declaraba el alcalde, Francisco Fumega. En relación a las tasas, reconocía que ahora aún no se podrán bajar "porque habería que ver a viabilidade de cada servizo", aunque sí congelar.
