Dos vehículos aparcados en la calle Conde Vallellano de Carballiño resultaron con daños materiales tras la caída de parte de la cornisa de un edificio a las tres de la madrugada del martes. La Policía Local colocó vallas en la zona afectada, mientras el arquitecto municipal elaborará un informe instando a los propietarios del inmueble a efectuar las reformas necesarias. El desprendimiento no provocó heridos.
La caída de cascotes procedentes de una antigua cornisa de un inmueble ubicado en la calle Conde Vallellano de Carballiño causó daños en dos automóviles estacionados en dicha calle. El suceso se produjo al filo de las 3,00 horas de ayer, tras una llamada vecinal a la Policía Local alertando que frente al número 45 del citado vial habían caído piedras del tejado.
La patrulla de agentes del turno de madrugada acudieron al lugar y descubrieron que dos vehículos allí aparcados -una furgoneta pequeña marca Ford Transit y un Peugeot 405presentaban desperfectos en su carrocería debido al desprendimiento de la cornisa.
Los policías municipales también comprobaron que no había daños personales debido a que en esa franja horaria la circulación peatonal es prácticamente inexistente. Los agentes, con el auxilio de la Agrupación Local de Protección Civil, colocaron unas vallas de protección en el perímetro del área afectada, ubicada en la confluencia con la calle Evaristo Vaamonde y a 20 metros del templo parroquial de A Veracruz.
Primera valoración
El arquitecto municipal se trasladó en la mañana hasta el edificio, comprobando que el alero desprendido del edificio es de hormigón y, según la Policía Local, su antigüedad es superior a los 20 años. De esta forma, el técnico de Urbanismo del Concello carballiñés elaborará un informe instando a los propietarios del inmueble a corregir las deficiencias en la estructura. Los daños en los vehículos serán valorados en breve por las compañías de seguros a las que están afiliados sus propietarios.
La patrulla de agentes del turno de madrugada acudieron al lugar y descubrieron que dos vehículos allí aparcados -una furgoneta pequeña marca Ford Transit y un Peugeot 405presentaban desperfectos en su carrocería debido al desprendimiento de la cornisa.
Los policías municipales también comprobaron que no había daños personales debido a que en esa franja horaria la circulación peatonal es prácticamente inexistente. Los agentes, con el auxilio de la Agrupación Local de Protección Civil, colocaron unas vallas de protección en el perímetro del área afectada, ubicada en la confluencia con la calle Evaristo Vaamonde y a 20 metros del templo parroquial de A Veracruz.
Primera valoración
El arquitecto municipal se trasladó en la mañana hasta el edificio, comprobando que el alero desprendido del edificio es de hormigón y, según la Policía Local, su antigüedad es superior a los 20 años. De esta forma, el técnico de Urbanismo del Concello carballiñés elaborará un informe instando a los propietarios del inmueble a corregir las deficiencias en la estructura. Los daños en los vehículos serán valorados en breve por las compañías de seguros a las que están afiliados sus propietarios.
