CELEBRACIÓN

En el corazón de las parroquias

El Concello de Carballiño rindió homenaje al movimiento asociativo coincidiendo con la celebración del 25 aniversario de la Festa das Parroquias, que tuvo lugar ayer en el Parque municipal, en donde se soplaron las 25 velas.

El Parque municipal fue el escenario elegido para la celebración del 25 aniversario de la Festa das Parroquias. Allí se dieron cita representantes de la práctica totalidad de las 24 asociaciones de vecinos de las 15 parroquias de Carballiño y, tal y como había anunciado el Concello, los presidentes y expresidentes de las juntas directivas que recibieron un merecido reconocimiento por el esfuerzo realizado en favor del asociacionismo y de las buenas relaciones entre las distintas localidades del rural.

No faltaron tampoco los tres impulsores, no sólo de la fiesta, sino también de las primeras asociaciones vecinales que cogían el relevo de los antiguos pedáneos a mediados de la década de los años 80, en el siglo pasado. Eduardo Bernárdez, Manuel Dorrego y Ramón Piteira, recordaban aquellos primeros años, cuando se puso en marcha la Asociación de Veciños Camiño en la villa, y fueron proliferando poco a poco en años sucesivos las otras entidades en el rural.

Así, también se fueron construyendo los centros sociales, convirtiéndose en lugares de encuentro, de fiesta y de gran actividad social y cultural, que contribuyen a mantener vivos los pueblos del rural, de los que ya han desaparecido las antiguas tabernas. Los centros sociales fueron todo un logro, empezando por el de Sagra, según apuntaba Manuel Dorrego, y contando con el apoyo del Concello. Eso lo recuerda bien el excalde, Manuel Vázquez, y también Argimiro Marnotes padre, que presidía el Concello cuando empezaba a surgir el movimiento asociativo. Ambos no quisieron perderse el aniversario.

LOS ORÍGENES

"Xuntábamonos os tres para organizar actividades e un día xurdiu a idea da festa, e así foi como a primeira edición se celebrou en Sagra, no 1993", apuntaba Eduardo Bernárdez, acompañado de Manuel Dorrego y Ramón Piteira. Durante cuatro o cinco años fueron las asociaciones de vecinos quienes asumían todo el esfuerzo organizativo, "pero era moito traballo e non tíñamos cartos, así que puxémonos dacordo cos grupos políticos do Concello, e os tres, PP, PSOE e BNG presentaron ao pleno uha moción coxunta para institucionalizar a festa, desde entón, aínda que a organización lle corresponde cada ano a unha asociación, o Concello colabora e financia", explicabaEduardo Bernárdez.

Además, se constituyó una federación de asociaciones, en la que recayó la organización de este 25 aniversario, e incluso se editaron 16 números de un periódico: "A voz das parroquias".

El día de ayer fue especialmente emotivo, recordando la larga trayectoria de las asociaciones. El alcalde, Francisco Fumega, y la concejala de Medio Rural, Charo González, entregaron diplomas y el libro de Manuel María "Cantigueiro de Orcellón" a los presidente y expresidentes, después de la comida, en la que disfrutaron del tradicional menú, con empanada, pulpo, carne y postres, animada por los regueifeiros Benito Lobariñas y Suso de Sorne. También se sirvió una gran tarta de la pastelería Royal, con las 25 velas de aniversario, que soplaron los representantes de las asociaciones.

Antes, la Banda Escuela de Música de Carballiño ofrecía una actuación desde el palco de la pista de baile, mientras se iban acercando los asistentes y se producían los entrañables reencuentros.

Ya por la tarde, hubo competiciones de cartas, juegos populares y un taller de cestería, con el artesano Osorio Ramos. Posteriormente se entregaba el simbólico ramo a los organizadores de la próxima edición de la fiesta y remataba la jornada con la actuación del grupo Maratón.

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