Los técnicos descubrieron ayer una fisura entre uno de los pilares y una viga de la fachada de la estación de autobuses de Carballiño que será necesario reparar por motivos de seguridad. Asimismo, han colocado tres testigos de escayola para observar si las grietas que se abrieron el pasado viernes, por cuyo motivo se precintó el edificio durante dos horas y media, siguen creciendo. Además, una cata en el suelo del porche reveló que el pavimento está en el aire, lo que está provocando su hundimiento.
Un técnico de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras junto con el arquitecto municipal y el concejal de Urbanismo realizaron ayer una inspección del edificio de la estación de autobuses de Carballiño, tras la alarma que se generó el pasado viernes con la apertura de grietas en la fachada principal y el hundimiento del suelo del porche, que motivó el desalojo del personal y la paralización de la actividad durante dos horas y media.
Con tal motivo, a lo largo de la mañana se realizó una cata del repisado del pavimento, comprobando que las baldosas están en el aire, por cuyo motivo es necesario hacer un relleno, puntualizó el arquitecto municipal, Sergio Mascareñas, que también señaló que no reviste ningún peligro para el edificio.
Más compleja se presenta especialmente una de las grietas, que se originó entre uno de los pilares y la pared, causando el pasado viernes un considerable ruido al resquebrajarse la masa, por cuyo motivo el personal de la estación avisó al Concello, que procedió a precintar la fachada.
Testigos
Según señaló Sergio Mascareñas, una vez levantadas las placas del techo han observado la existencia de una pequeña fisura entre el referido pilar y una de las vigas. El técnico de la Xunta procedió a colocar tres testigos de escayola para poder observar dentro de unos días si aumenta la separación de las grietas.
Serán los técnicos los que determinarán las intervenciones a realizar en próximos días, si bien Sergio Mascareñas considera que al menos en la fisura de la viga seguramente habrá que hacer reparaciones por seguridad. En cuanto al suelo del porche, el concejal de Urbanismo, Manuel Amil, señaló que hai que levantalo todo porque a baldosa está no aire.
PREVENCIÓN
Sin peligro de derrumbe
La estación de autobuses continúa su habitual actividad, tras el susto del pasado viernes, y mientras las autoridades adoptan las medidas de seguridad preventivas que recomiendan los técnicos, insistiendo en que no existe peligro de que se derrumbe el edificio. En lo que respecta a las posibles causas de la formación de grietas, el arquitecto municipal, Sergio Mascareñas, señaló que se desconocen, porque pueden ser diversos los motivos. En ese sentido, el arquitecto se inclina a pensar que pueden deberse a una pequeña dilatación más que a un asentamiento de la cimentación, que afectaría a otras partes del edificio, mientras que las grietas únicamente se originaron en la fachada principal. Asimismo, considera que el hundimiento del suelo del porche no guarda relación con las grietas.
Con tal motivo, a lo largo de la mañana se realizó una cata del repisado del pavimento, comprobando que las baldosas están en el aire, por cuyo motivo es necesario hacer un relleno, puntualizó el arquitecto municipal, Sergio Mascareñas, que también señaló que no reviste ningún peligro para el edificio.
Más compleja se presenta especialmente una de las grietas, que se originó entre uno de los pilares y la pared, causando el pasado viernes un considerable ruido al resquebrajarse la masa, por cuyo motivo el personal de la estación avisó al Concello, que procedió a precintar la fachada.
Testigos
Según señaló Sergio Mascareñas, una vez levantadas las placas del techo han observado la existencia de una pequeña fisura entre el referido pilar y una de las vigas. El técnico de la Xunta procedió a colocar tres testigos de escayola para poder observar dentro de unos días si aumenta la separación de las grietas.
Serán los técnicos los que determinarán las intervenciones a realizar en próximos días, si bien Sergio Mascareñas considera que al menos en la fisura de la viga seguramente habrá que hacer reparaciones por seguridad. En cuanto al suelo del porche, el concejal de Urbanismo, Manuel Amil, señaló que hai que levantalo todo porque a baldosa está no aire.
PREVENCIÓN
Sin peligro de derrumbe
La estación de autobuses continúa su habitual actividad, tras el susto del pasado viernes, y mientras las autoridades adoptan las medidas de seguridad preventivas que recomiendan los técnicos, insistiendo en que no existe peligro de que se derrumbe el edificio. En lo que respecta a las posibles causas de la formación de grietas, el arquitecto municipal, Sergio Mascareñas, señaló que se desconocen, porque pueden ser diversos los motivos. En ese sentido, el arquitecto se inclina a pensar que pueden deberse a una pequeña dilatación más que a un asentamiento de la cimentación, que afectaría a otras partes del edificio, mientras que las grietas únicamente se originaron en la fachada principal. Asimismo, considera que el hundimiento del suelo del porche no guarda relación con las grietas.
