Insta a Patrimonio a que informe para evitar el derribo de un muro
El proyecto de una playa fluvial en Irixo está pendiente de un informe de Patrimonio que evite el derribo del muro que se construyó en el cauce del río Viñao. Han transcurrido cerca de 15 años desde que el Concello de Irixo realizara obras de acondicionamiento de un área de recreo en el entorno del Viñao, con vistas también a la creación de una playa fluvial. El proyecto no se pudo acabar porque la Confederación Hidrográfica Miño-Sil no sólo paralizó las obras sino que también sancionó al Concello, al mismo tiempo que ordenó el derribo de todos los elementos que se habían instalado en la zona de recreo y del muro de canalización del río, que se construyó para habilitar una playa fluvial, al mismo tiempo que se pretende evitar las riadas durante el invierno.
Irixo se quedó así sin zona de baño y pendiente de una orden de derribo que se ejecutó sólo en parte, con el levantamiento de unas aceras y mesas , entre otras cosas, por encontrarse en zona de servidumbre.
El grupo socialista acaba de presentar en estos días una moción para debatir sobre la situación de este entorno en un pleno, instando al gobierno local a que "retome o expediente da praia fluvial e legalice as obras realizadas", y que "se proceda á construción da praia fluvial neste ou noutro emprazamento mais idóneo para desfrute dos veciños", según apunta el portavoz, Iago Fariñas. El alcalde, Manuel Penedo (PP) puntualiza que el proyecto está paralizado y pendiente de que Patrimonio emita un informe que confirme que el derribo del muro puede afectar a la estructura del puente medieval, ya que "sempre prevalecerá o criterio de Patrimonio sobre o da Confederación Hidrográfica Miño-Sil", matizaba Penedo.
Sin embargo, hace aproximadamente dos años que el Concello de Irixo solicitó el informe a Patrimonio, pero por el momento no ha recibido respuesta, por cuyo motivo, el regidor municipal anunciaba que en próximos días se dirigirá de nuevo a los responsables instándoles a agilizar la resolución para saber si hay que derribar el muro o por el contrario mantenerlo y así seguir adelante con el proyecto de la playa fluvial. "Para a praia está todo feito, só falta colocar unha comporta", añadía Manuel Penedo, quien asegura que "non entendo porque a Confederación non nós da a licencia, porque no ano 2000 autorizou obras a un veciño no mesmo sitio".
Las obras de adecentamiento de las márgenes habían sido financiadas por la Diputación provincial. Se había desplazado unos metros el puente medieval con autorización de Patrimonio y se habían realizado otras obras como dotación de aceras, que ya han sido suprimidas. El alcalde afirma que el Concello solicitó la licencia, pero que faltaba alguna documentación.
Por su parte, la Confederación Hidrográfica Miño-Sil abrió el expediente sancionador a raíz de la construcción de 60 metros de muro de hormigón y por la dotación de aceras en la zona de servidumbre del río sin autorización. El Concello había pedido permiso en el 2004, pero no había aportado la documentación requerida, por cuyo motivo se inició el expediente sancionador al año siguiente.
A la vista de la situación, el grupo socialista se muestra crítico y declara que "a pesar de todo o tempo transcorrido, máis de 15 anos, e o diñeiro que se gastou entre outros, na suposta praia fluvial do Irixo ao seu paso pola ponte; a realidade é que non existe tal praia, nin os seus vestiarios, nin duchas, nin ningún lugar neste Concello apropiado nin acondicionado para o baño".
