La baja temeraria del presupuesto de partida para la ejecución del proyecto de acondicionamiento y embellecimiento de la Rúa Ourense, en Carballiño, es el motivo de la solicitud de la documentación que justifique esa rebaja de aproximadamente un 10% a la empresa seleccionada por parte de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. El alcalde de Carballiño, Francisco Fumega, afirma que en cuestión de días quedará resuelto definitivamente el proceso para empezar las obras de este proyecto que parte de una inversión de 1,7 millones de euros.
Se trata de una de las principales entradas al casco urbano con importantes deficiencias, contemplando también la eliminación de los vertidos de aguas residuales al río Carrás, procedentes de esa misma calle, de la Avenida 25 de Xullo y de una parte del polígono industrial.
El proyecto incluye la construcción de una nueva glorieta, la reposición del pavimento, mobiliario urbano, aceras y ajardinamiento y está financiada por el Concello y la Confederación Hidrográfica del Miño Sil, en un 80% y 20% respectivamente.
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Además de eliminar definitivamente los vertidos al Carrás, también se ejecutarán nuevas redes de saneamiento y de recogida de las aguas pluviales, así como la renovación de las redes de abastecimiento.
Los trabajos se ejecutarán en un tramo de 550 metros, entre las intersecciones con las calles Celso Emilio Ferreiro y 25 de Xullo, en donde se proyecta la glorieta.
El alcalde, Francisco Fumega, destacaba, coincidiendo con la firma del convenio con la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, la importancia de este proyecto, teniendo en cuenta que las obras permitirán sanear el río Carrás y todo su entorno, al mismo tiempo que se evitarán las inundaciones que se producen con las lluvias.
