La Corporación abordará mañana esta iniciativa popular, aunque el alcalde no prevé variar las tasas.
La Corporación de Punxín debatirá mañana viernes la iniciativa popular impulsada por la comisión de aguas (integrada por vecinos representantes de cada parroquia) mediante la cual se pretende conseguir del Ayuntamiento una rebaja del 50% en la tasa del agua. La iniciativa está avalada por 300 firmas de personas mayores de 18 años, que supone en torno a un 40% de la población de este municipio.
La comisión aporta para ser debatido en el pleno un estudio económico con el que pretende demostrar que el servicio es mucho más barato si está gestionado por el Concello. De esta forma, el estudio realizado por técnicos, apunta un gasto anual de 46.000 euros, frente a los aproximadamente 126.000 que costaba cuando estaba en manos de Aquagest, antes de que la empresa y autoridades locales llegasen a un acuerdo para la rescisión del contrato.
Optimizando los recursos públicos, la comisión pretende que la media de 150 euros anuales que paga cada usuario por el suministro se reduzca a la mitad, siguiendo el modelo del ayuntamiento vecino de Cenlle, según apuntaba el portavoz de la comisión Joaquín Moldes.
Este vecino también criticó la actitud del alcalde que, tras la presentación de la iniciativa popular durante el pasado mes de enero, adjudicó el mantenimiento de la red de aguas y la realización de analíticas a sendas empresas que cobran cerca de 90.000 euros, una cantidad que la comisión considera excesiva. Joaquín Moldes aseguró que si no logran su objetivo de que se rebaje el recibo, se encerrarán en el Concello después del pleno.
Por su parte, el alcalde de Punxín, Manuel Vázquez, declaraba ayer que "de momento non vamos baixar as tasas, aínda que imos estudiar os gastos que temos, porque son variables e aínda descoñecemos o que suporá para o concello". El pleno también acordará devolver los contadores del agua a los usuarios, que estaban antes en manos de Aquagest.
