La Consellería de Medio Ambiente se comprometió a colaborar con la gestión del servicio
El alcalde de Cenlle, Gabriel Alén, inició los trámites encaminados a la constitución de un consorcio para la gestión de la nueva captación de agua en el Miño, destinada a abastecer a este municipio junto con los de San Amaro y Punxín. Con tal motivo, el regidor de Cenlle ha mantenido en días pasados una reunión con la conselleira de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio, Beatriz Mato, y con el director de Augas de Galicia, Roberto Rodríguez, que se han comprometido a integrarse en el referido consorcio, del que también formarán parte los tres concellos beneficiarios de este proyecto, que esperan también la implicación directa de la Diputación provincial.
El nuevo bombeo del Miño supuso una inversión que sobrepasó los tres millones de euros y una vez rematadas las obras, los tres municipios aprobaron en pleno solicitar a la Diputación la asistencia técnica mientras no se ponga en marcha el consorcio, que será quien decida sobre la futura gestión del servicio.
GESTIÓN
Gabriel Alén declaraba que la concesión a la Diputación finaliza a 31 de diciembre, si bien, la institución provincial prestará la asistencia técnicas hasta que se constituya el consorcio, que se encargará de realizar el correspondiente estudio sobre las posibles vías de gestión de este servicio intermunicipal.
De esta forma, el alcalde de Cenlle también responde a las críticas del PSdeG en los tres concellos, que rechazaron en sus respectivos plenos la concesión de la asistencia técnica a la Diputación, insistiendo en que sólo es una medida temporal y que por ello ya se han iniciado las gestiones encaminadas a poner en marcha el referido consorcio.
Los costes de esta asistencia técnica serán repercutidos a los tres ayuntamientos según su porcentaje de participación, en función del número de abonados y de los metros cúbicos de agua consumidos. Por un lado, está el gasto fijo, que corresponde al personal de mantenimiento, incluido el de las guardias, también están los controles analíticos y potencia energética. Esto supondrá para Cenlle un coste de 1.737 euros mensuales, para Punxín, 1.085 euros y para San Amaro, de 1.520 euros al mes.
Por otro lado, están los costes variables, en función de los metros cúbicos de agua consumidos.
Con este bombeo, los tres municipios solucionan los problemas de escasez de agua que tenían en algunas localidades y también la contaminación de arsénico, que afecta fundamentalmente a Punxín.
