Los propietarios de los montes de Cenlle deberán talar los árboles que estén afectando a las carreteras, así como todos aquellos situados a dos metros de distancia de las calzadas. El alcalde, Gabriel Alén, ha hecho público un bando comunicando a los vecinos la obligación que tienen de realizar las talas, ya que 'de non proceder de xeito voluntario o Concello, a principio de ano, procedera a sua limpeza cubrindo os gastos que esto xenera a cargo do valor da propia madeira'.
Las autoridades locales tienen en cuenta que Cenlle es un municipio de abundantes recursos forestales, principalmente de pino, que 'ó estar preto da estrada causa desperfectos moi importantes na mesma por levantamentos do asfalto ocasionados polas raices', según apunta el regidor.
Además, también señala que todos los años se producen durante el invierno caídas de árboles y ramas en las distintas carreteras, lo que implica, en opinión de los responsables municipales, un peligro para la circulación y también para los peatones, junto con el gasto que acarrea su posterior retirada. 'O caso máis destacado foi polo efecto do furacan klaus no ano 2009, cunha caída masiva de piñeiro na estrada provincial Valdepereira -Maside ao seu paso pola localidade de Cenlle', recuerda Gabriel Alén. En consecuencia, el Concello considera necesario que sean los particulares propietarios de montes y los mismos comuneros los que asuman este trabajo, que de no realizar correrá por cuenta del Concello, financiándolo con la venta de la madera que se obtenga.
Además, también señala que todos los años se producen durante el invierno caídas de árboles y ramas en las distintas carreteras, lo que implica, en opinión de los responsables municipales, un peligro para la circulación y también para los peatones, junto con el gasto que acarrea su posterior retirada. 'O caso máis destacado foi polo efecto do furacan klaus no ano 2009, cunha caída masiva de piñeiro na estrada provincial Valdepereira -Maside ao seu paso pola localidade de Cenlle', recuerda Gabriel Alén. En consecuencia, el Concello considera necesario que sean los particulares propietarios de montes y los mismos comuneros los que asuman este trabajo, que de no realizar correrá por cuenta del Concello, financiándolo con la venta de la madera que se obtenga.
