La empresa Aqualia, concesionaria del suministro de agua y saneamiento de Ribadavia, ha entregado al Concello el estudio que le había solicitado sobre las posibles alternativas de captación a fin de garantizar el abastecimiento para consumo humano en épocas de sequía. La iniciativa se puso en marcha a raíz de la escasez de agua en el regato Maquiáns que sufrió la población durante el verano y otoño del 2011, que casi obliga a realizar cortes en el suministro, aunque finalmente se fue paliando el problema con una disminución de la presión.
La empresa plantea dos posibles captaciones: en el Avia, que supondrían una inversión estimativa de más de 500.000 euros, o en el Miño, cuyo coste sería mayor, de aproximadamente 700.000 euros, debido a que la conexión con el depósito de almacenamiento tendría más longitud e incluso transcurriría por algún tramo urbano de carretera que sería necesario reponer.
El alcalde, Marcos Blanco, aseguró que la elección estará en función de la alternativa que ofrezca garantías en el suministro, no en criterios económicos. Por ese motivo, considera que la captación en el Miño podría ser la más conveniente, dado que el Avia también reduce su caudal cuando hay sequía.
Al respecto, señaló que en un plazo de dos semanas, los portavoces municipales mantendrán una reunión con los responsables de Aqualia a fin de estudiar con detalle ambas posibilidades, con vistas a redactar un proyecto definitivo. Para la financiación, las negociaciones con la empresa serán decisivas, ya que las autoridades locales están dispuestas a aprobar una prórroga en la concesión del servicio, que remata en 2015, a fin de que Aqualia también contribuya a la realización de las obras, junto con otros organismos a los que solicitarán ayuda.
El portavoz del BNG, Anxo Collarte, también propuso al grupo de gobierno, que se pidan estudios a otras empresas sobre las posibilidades de captación y el coste, ya que siempre cabe la posibilidad de que se acuerde una nueva convocatoria para adjudicar el servicio.
El alcalde, Marcos Blanco, aseguró que la elección estará en función de la alternativa que ofrezca garantías en el suministro, no en criterios económicos. Por ese motivo, considera que la captación en el Miño podría ser la más conveniente, dado que el Avia también reduce su caudal cuando hay sequía.
Al respecto, señaló que en un plazo de dos semanas, los portavoces municipales mantendrán una reunión con los responsables de Aqualia a fin de estudiar con detalle ambas posibilidades, con vistas a redactar un proyecto definitivo. Para la financiación, las negociaciones con la empresa serán decisivas, ya que las autoridades locales están dispuestas a aprobar una prórroga en la concesión del servicio, que remata en 2015, a fin de que Aqualia también contribuya a la realización de las obras, junto con otros organismos a los que solicitarán ayuda.
El portavoz del BNG, Anxo Collarte, también propuso al grupo de gobierno, que se pidan estudios a otras empresas sobre las posibilidades de captación y el coste, ya que siempre cabe la posibilidad de que se acuerde una nueva convocatoria para adjudicar el servicio.
