El envejecimiento de las plantillas de facultativos en la provincia está mucho más agudizado que en el resto de Galicia
La pasada semana empezó con la aprobación de la reforma de la Lei de Saúde que crea una única área sanitaria en la provincia y acabó con una multitudinaria manifestación en Verín en defensa de la sanidad pública. Está claro que la sanidad ourensana está en primer plano, y amenaza con seguir estándolo todavía más, ya que muchos profesionales están alertando sobre la falta de médicos en un periodo a 10 años vista, y los datos lo avalan.
En la actualidad, las cifras todavía no muestran que haya un importante descenso de facultativos en ejercicio respecto a los que había hace años en la Atención Primaria, es decir, centros de salud y consultorios. De momento, están atendidos por un total de 257 médicos de familia y 33 pediatras, es decir, 290 facultativos. La cifra es semejante a la registrada hace diez años, cuando eran 293 los médicos distribuidos en los distintos puntos de la provincia, según los datos estadísticos del Ministerio de Sanidad.
PROBLEMA A LA VISTA
El problema se avecina a 10 años vista, enmarcado en una tesitura de envejecimiento de las plantillas que es común a todo el territorio nacional, pero que se agudiza en el caso de la provincia de Ourense. Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), a inicios de 2017 había un total de 1.532 médicos colegiados en la provincia, de los cuales, excluyendo a los ya jubilados, el 41% tiene entre 55 y 64 años, es decir, que se jubilará en la próxima década. Esta cifra es muy superior al 33% de peso de este colectivo entre las cifras totales en Galicia, y el 28% que representan en el conjunto de toda España.
Este dato cobra todavía más peso al echar la vista años, cuando el colectivo de médicos entre 55 y 64 años solo suponía un 18% del montante total.
El envejecimiento de las plantillas es algo de lo que viene advirtiendo desde hace tiempo el Colegio de Médicos de Ourense, en el que su presidente, José Luis Jiménez, señala que "ya que no tenemos médicos para atender muchos lugares", subrayando el problema de las "jubilaciones masivas" de toda la masa de médicos procedentes del baby-boom que se incorporaron a la vez. El Servizo Galego de Saúde (Sergas) confirma que esta situación está ya generando problemas para la reposición o sustitución de facultativos.
¿POR QUÉ AHORA?
Según el gerente del Sergas, Antonio Fernández-Campa, "hubo una época de mayor desarrollo en el que se crearon muchas estructuras sanitarias, por lo que hay un elevado número de facultativos en edad parecida y que se incorporó al mismo tiempo".
SE EXTENDERÁN HASTA LOS 68 AÑOS LAS JUBILACIONES
Para poner freno a la posible falta de facultativos a corto plazo, el Sergas ha concedido la posibilidad a los médicos para que puedan prorrogar la edad de jubilación hasta los 67 años. Lo hizo ya hace un tiempo, y ahora mismo, muchos de esos facultativos están a punto de llegar a los 67. Fernández-Campa, el gerente del Sergas, confirma que "los que van a vencer ahora, se les permitirá prorrogarlo dos años más", es decir, llegar hasta el límite de los 68 años de edad.
Además, la Consellería de Sanidade ha sacado 241 nuevas plazas para médicos de familia, "para que se puedan incorporar ya nuevos profesionales", indica Fernández-Campa. El Gobierno gallego ha propuesto al Ministerio de Sanidad la acreditación de nuevas unidades de formación" para poder seguir incrementando a oferta de prazas MIR". En el horizonte 2020, el objetivo es "estabilizar o 95% do cadro de persoal, reducindo a porcentaxe de eventualidade ao 5%".
