“La prevención está destinada fundamentalmente a que si surge un incendio los trabajos realizados permitan que los medios de extinción puedan cargar agua en diferentes puntos, llegar más rápido por las pistas, cuartear el territorio y, en definitiva, mejorar los tiempos de reacción”, explica Manuel Rodríguez, director general de Defensa do Monte de la Xunta de Galicia, a las puertas del inicio de la campaña de extinción de incendios.
Y es que todas las actuaciones son pocos para trabajar en la minimización de daños en caso de que se produzcan incendios forestales. Como apunta Rodríguez, “la causalidad siempre está presente, por lo que trabajamos orientándonos a que la virulencia de los incendios que se produzcan sea la menor posible”.
Con las actuaciones de prevención aún en marcha, actualmente la provincia de Ourense tiene gestionado el 61% del terreno, es decir, 9.112,51 hectáreas repartidas en 194.314 parcelas ya están desbrozadas y limpias. Esto está dentro del convenio de protección de las aldeas de la Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Rural.
“Este convenio es el de limpieza de las franjas de seguridad y nosotros lo que hacemos, porque es competencia municipal, es ayudar a los concellos a delimitar las franjas para que particulares y Administración puedan consultar las parcelas que están afectadas”, señala el director de Defensa do Monte. “A partir de ahí se comprueba el cumplimiento, si se limpian o no, y se hace un monitoreo todos los años para ver la evolución del convenio”, añade.
Balance positivo de las cifras
En este sentido, este año se completó la comprobación de la práctica totalidad de las franjas secundarias de 48 concellos, inspeccionando el estado de 321.487 parcelas que suman un total de 14.552,04 hectáreas. Sobre los datos, Rodríguez hace balance y afirma que lo ideal sería que “fuera el 100% evidentemente, pero el porcentaje de parcelas gestionadas y dada la juventud del convenio, considero que es un resultado muy bueno. Desde el principio a ahora vemos que hay avances y funciona, eso es una buena noticia”.
Este convenio nació hace tres años y desde entonces se llevan generado un total de 83.619 notificaciones y 62.711 publicaciones en diarios oficiales de las diferentes provincias, para advertir a los propietarios de las parcelas no gestionadas de que, en el caso de que no las limpien, se procederá a su ejecución por parte de la Administración pública, con la consiguiente repercusión del coste de dichos trabajos y con la imposición de la correspondiente sanción por no cumplir la ley.
También con relación a este convenio, la Consellería de Medio Rural entregó ya un total de 83 planes municipales antincendios a otros tantos concellos. De estos 83 planes ya están aprobados un total de 64 en la provincia de Ourense, porque primero la Consellería remite un borrador del plan para que sea analizado por el Gobierno local, y una vez dado el visto bueno, se remite el documento final para su aprobación en pleno.
Así, “este convenio es un refuerzo para las entidades locales, es necesario trabajar en conjunto, por ello nosotros ayudamos con el tema de la limpieza, delegando también las notificaciones a los propietarios, les mandamos las publicaciones a los concellos que haya que remitir de parcelas desconocidas… Es una ayuda contra los incendios”, concluye Rodríguez.
Desde 2021 se construyeron 107 nuevos puntos de agua
Más allá del convenio de protección de las aldeas que mantiene la Consellería de Medio Rural con los concellos de la provincia, la Xunta de Galicia tiene trabajos de prevención contra los incendios forestales de carácter propio. “En prevención trabajamos varias líneas y la parte propia nuestra es a través de obras contratadas o hechas por nuestro personal, bien sea de subvenciones y órdenes de ayuda a comunidades de montes o bien las que se hacen en montes de gestión pública”, explica el director general de Defensa do Monte.
En cuanto a las subvenciones a comunidades de montes se sigue la línea de trabajos preventivos como desbroces, puntos de agua o clareos de basas, entre otros. Mientras, en las actuaciones en las zonas que son propiedad de la Administración gallega, entran los cortafuegos, el arreglo de pistas, los aclareos de masas forestales, la limpieza de pistas y la construcción de puntos de agua para usar el dispositivo, entre otras.
Así, desde el pasado año hasta ahora se han preparado 3.718,4 hectáreas para cortafuegos, se destinaron 2.334,97 kilómetros a pistas y se construyeron 107 puntos de agua nuevos, además de arreglar 2.195 ya existentes en la provincia. Estas actuaciones buscan que si surge un incendio, “los medios de extinción puedan cargar agua en esos puntos nuevos y extinguirlo antes de que sea más grande. Una pista no evita un incendio, pero permite acceso rápido y fácil a los medios, por ejemplo”, remarca Rodríguez.
