El grupo Alcohólicos Anónimos cumple 80 años, fecha que fue aprovechada ayer en Ourense para un encuentro entre miembros de grupos de Galicia y Asturias con el objetivo de hacer visible su trabajo.
Hace 80 años, un corredor de bolsa y un médico pusieron en Estados Unidos los cimientos que darían lugar al primer grupo de Alcohólicos Anónimos, y que en la actualidad funciona a través de más de 100.000 grupos locales en unos 180 países. Con motivo de esta efeméride y con el objetivo de visibilizar su trabajo ante la sociedad, miembros de los cuatro grupos de Alcohólicos Anónimos existentes en Ourense, así como el de apoyo a los familiares, se citaron ayer en el Auditorio de Ourense, con la presencia del presidente de la junta del servicio General de Alcohólicos Anónimos de España, Laureano López Rivas; del subdelegado del Gobierno, Roberto Castro, y la edil de Cultura, Ana Garrido.
Laureano López, médico jubilado no alcohólico (por eso no está obligado a guardar el anonimato), insistió en su intervención en la importancia de recordar el grave problema que supone el alcohol y destacó que en la actualidad "ha descendido el consumo habitual del alcohol, pero nos enfrentamos al serio problema del gran aumento del consumo durante los fines de semana, donde los más afectados son jóvenes, justamente el colectivo que menos acude, no sólo a nosotros, sino a cualquier otro servicio de salud".
En el encuentro de ayer en Ourense, Laureano López subrayó que "cualquiera puede acudir a Alcohólicos Anónimos. Aquí no se pide nada a nadie, ni se juzga a nadie, y los resultados están a la vista en estos 80 años", como así lo ratificaron las personas presentes que han visto como les ha cambiado la vida. "Ahora es vivir de verdad otra vez. Te cambia todo, incluso las relaciones con tu familia y tu entorno", señalaba uno de los presentes.
López asegura que uno de los problemas que tienen es que "con el lenguaje que se usa en las directrices del grupo, no logramos llegar a la gente joven. Es un vocabulario de los años 30, con referencias a Dios, que no a las religiones, y que llega desde Estados Unidos. Pero no es fácil cambiarlo, porque debería hacerse a nivel mundial, y en otros sitios sí funciona".
La existencia de cuatro grupos en Ourense es, según Laureano López, algo "muy positivo. Es importante que trabajemos en grupos pequeños para que se funcione bien, así que cuantos más haya es una buena señal".
