María B.R. fue absuelta de un delito continuado de apropiación indebida y de otro de hurto en la tienda en la que trabajaba. El propietario de este local, un negocio 24 horas de la calle Jesús Soria, denunció a una de sus empleadas por, según su versión, jugar a la lotería dominicana pagando los tiques con el dinero que le entregaban los clientes para el pago de consumiciones o bienes.
Sin embargo, no se pudo acreditar, ni tampoco que la imputada fingiera devoluciones o anulaciones inexistentes y, con el dinero que debía entregar, pagase los tiques.
La fiscalía también acusó a María B.R. de retirar dinero de las páginas de envío de moneda al extranjero para pagar los billetes de esta lotería. Por otra parte, también se atribuyó a la acusada la responsabilidad de coger dinero de una caja de la tienda, de la que podría haberse llevado un total de 4.155 euros.
Dado que no pudo acreditarse que la imputada cometiese ninguna de estas acciones, el fallo de la sentencia fue absolutorio.