El choque contra una bionda de la A-52 ocasionó a su acompañante una minusvalía de 68%
La jueza del Penal 1 acaba de condenar a José Luis G.C., de 45 años, a dos años y un día de prisión así como a una indemnización de 364.375 euros a la mujer que viajaba con él y que sufrió graves lesiones en el accidente ocurrido el 9 de abril de 2009. La indemnización será abonada por el Consorcio de Compensación de Seguros ya que el vehículo carecía de póliza de cobertura. Asimismo, no podrá conducir durante tres años y cinco meses, lo que conllevará la pérdida de vigencia del permiso.
La sentencia lo condena por un delito contra la seguridad vial en concurso con otro de lesiones por imprudencia grave en tanto que el inculpado conducía bajo la influencia de las drogas ya que había consumido cocaína y heroína ese día, tal como él mismo reconoció y a tenor de los síntomas observados por la Guardia Civil. El siniestro se produjo en la A-52 en la salida dirección a Ourense del kilómetro 233 en una zona con velocidad limitada a 80 kilómetro por hora.
La víctima del accidente, de 40 años, invirtió en su curación 860 días de los cuales 106 estuvo hospitalizada. Las secuelas que padece afectan a su vida laboral, social, familiar y sexual.
El condenado reconoció que una hora antes del accidente, en la gasolinera de Ribadavia, había tomado cocaína y heroína, de hecho dijo que ese día él y su acompañante venían de Pontevedra de comprar la droga, que consumieron antes de llegar a Ourense.
La magistrada deja constancia que la ingesta de estupefacientes determinó el resultado del accidente porque afectaron a su capacidad para "controlar y manejar el vehículo". Incluso dice que la velocidad excesiva a la que tomó la curva (en torno a los 90 0 100 km/h) no hubiera supuesto un problema en estado normal teniendo en cuenta el estado del vehículo y la calzada. "Resulta evidente que la ingesta de drogas produjo en el acusado una merma de sus facultades psicofísicas, lo que le impidió circular con normalidad sin poner en peligro la seguridad tanto propia como de su acompañante y demás usuario de la vía", razona la jueza.
