Hasta 270 llamadas realizó Manuel E.G. a su expareja en menos de un día una vez rota la relación sentimental. Esa misma noche también la acosó con wasaps y mensajes de texto en los que la insultaba, además de reprocharle que mantuviera relaciones con otras personas. Esa misma noche se personó en la gasolinera en la que trabajaba la denunciante, con la que estuvo saliendo cuatro meses, y le dejó una nota manuscrita en el parabrisas en la que se refería a ella como “puta”.
El inculpado reconoció el delito de acoso que le valió la denuncia y en el juicio celebrado ayer en el Penal 2 aceptó 31 días de trabajos en beneficio de la comunidad y alejamiento de la víctima durante seis meses. En un primer momento, la fiscal 10 meses de prisión. El hostigamiento ocurrió el mismo día de la ruptura, el seis de marzo del pasado año, y provocó sensación de temor.
