La fuerte ralentización que han sufrido tramos de las obras de alta velocidad en la provincia ha hecho disparar las alarmas entre trabajadores y empresas del sector, que han visto cómo en las últimas semanas ha caído drásticamente la actividad y advierten de un próximo parón de obras.
Los mayores problemas se están dando entre Taboadela y Vilar de Barrio, dividido en tres subtramos (Taboadela-Ponte Ambía, Ponte Ambía-Miamán y Miamán-Porto). El trayecto, de 22 kilómetros, se inició entre finales de 2010 y principios de 2011, y, según los plazos estipulados en los contratos, debería estar terminado a finales de 2013.
De hecho, las obras están ya muy avanzadas (según estimaciones de empresarios que trabajan en la zona, el grado de ejecución oscila entre el 70% y el 90%) y, de mantenerse el ritmo, podrían concluir a final de año. No obstante, en los últimos meses -y en particular en junio- han sufrido un fuerte parón. De hecho, en alguno de los subtramos trabajaban hasta hace unas semanas más de 100 personas y en estos últimos días quedaban alrededor de 15. En otros, apuntan que se está retirando material y maquinaria, y hay obreros que indican que el trabajo que están realizando ya no es de avance, sino de mantenimiento de cara a un previsible parón de obras. Incluso afirman que se están tapiando los túneles -aún sin rematar- para evitar intrusos, en previsión de que las obras estén paradas durante varios meses.
En este sentido, empresarios consultados por este periódico sostienen que 'hay una caída de trabajo muy fuerte' aunque no tienen confirmación oficial de que vaya a haber un parón total. 'Pero todo apunta a que sí', opinan. No obstante, sí hay empresarios que aseguran rotundamente tener confirmación de que la intención de Adif es paralizar este tramo en verano. Sólo en el subtramo intermedio -que es el que va más avanzado- la UTE estaría analizando la opción de rematar los trabajos, porque paralizarlos y después reanudarlos supondría un coste mayor.
Los empresarios aluden a retrasos de pago en los últimos meses, que se han ido agravando. Así, las indican que las constructoras principales están teniendo dificultades para que Adif realice las certificaciones de obra, para así demorar los pagos. Mientras, las subcontratas sostienen que cobran a 240 días. 'Somos nós os que estamos adiantando os cartos e financiando a obra', afirman, y dicen que cada vez se les hace más difícil pagar a los obreros y proveedores.
'Estámonos vendo todos moi agobiados', manifiesta un empresario de una subcontrata que trabaja en la zona, mientras otro -que ha tenido que prescindir de dos tercios de su plantilla 'y sigo bajando'- apunta que 'nos están haciendo un daño terrible a todas las empresas auxiliares'.
Trabajadores de la zona manifiestan que ya ha habido despidos de personal, tanto de las subcontratas como de las UTE's. Desde CC.OO. sostienen que han tenido conocimento de empleados ós que 'lles diron a carta de despido e lles dixeron que era por paralización das obras, e que cando se reanuden -que non saben cando poderá ser- xa os volverán chamar'. Otros empleados que aún siguen en la zona indican que 'a empresa dixo que rematamos a finais de mes'.
Este periódico contactó ayer con Adif para conocer sus explicaciones al respecto, si bien de momento no respondieron.
VILAR DE BARRIO-LUBIÁN
Pero los problemas no sólo se están dando en el tramo entre Taboadela y Vilar de Barrio, sino que también desde esta localidad hasta Lubián se han producido cambios de obra en los tramos de la vía izquierda. Unos problemas que ya se vienen produciendo en los últimos tres meses y que Adif justificó en anteriores ocasiones como 'cambios de método constructivo', argumentando que pretenden reducir costes al construir un túnel derecho y, desde él, acceder al izquierdo. No obstante, desde el sector sostienen que la pretensión de Fomento es la de construir la vía derecha y, en la izquierda, abrir sólo el hueco de los túneles (de modo que en el futuro, si continúa la obra, ya no sería necesario emplear explosivos, que supondrían un gran peligro al estar la obra vía en servicio). Esta propuesta coincide con lo que contempla un informe interno de Adif (construir sólo una vía y posponer la otra) pero el organismo público ha negado que lo vaya a poner en marcha.
De hecho, las obras están ya muy avanzadas (según estimaciones de empresarios que trabajan en la zona, el grado de ejecución oscila entre el 70% y el 90%) y, de mantenerse el ritmo, podrían concluir a final de año. No obstante, en los últimos meses -y en particular en junio- han sufrido un fuerte parón. De hecho, en alguno de los subtramos trabajaban hasta hace unas semanas más de 100 personas y en estos últimos días quedaban alrededor de 15. En otros, apuntan que se está retirando material y maquinaria, y hay obreros que indican que el trabajo que están realizando ya no es de avance, sino de mantenimiento de cara a un previsible parón de obras. Incluso afirman que se están tapiando los túneles -aún sin rematar- para evitar intrusos, en previsión de que las obras estén paradas durante varios meses.
En este sentido, empresarios consultados por este periódico sostienen que 'hay una caída de trabajo muy fuerte' aunque no tienen confirmación oficial de que vaya a haber un parón total. 'Pero todo apunta a que sí', opinan. No obstante, sí hay empresarios que aseguran rotundamente tener confirmación de que la intención de Adif es paralizar este tramo en verano. Sólo en el subtramo intermedio -que es el que va más avanzado- la UTE estaría analizando la opción de rematar los trabajos, porque paralizarlos y después reanudarlos supondría un coste mayor.
Los empresarios aluden a retrasos de pago en los últimos meses, que se han ido agravando. Así, las indican que las constructoras principales están teniendo dificultades para que Adif realice las certificaciones de obra, para así demorar los pagos. Mientras, las subcontratas sostienen que cobran a 240 días. 'Somos nós os que estamos adiantando os cartos e financiando a obra', afirman, y dicen que cada vez se les hace más difícil pagar a los obreros y proveedores.
'Estámonos vendo todos moi agobiados', manifiesta un empresario de una subcontrata que trabaja en la zona, mientras otro -que ha tenido que prescindir de dos tercios de su plantilla 'y sigo bajando'- apunta que 'nos están haciendo un daño terrible a todas las empresas auxiliares'.
Trabajadores de la zona manifiestan que ya ha habido despidos de personal, tanto de las subcontratas como de las UTE's. Desde CC.OO. sostienen que han tenido conocimento de empleados ós que 'lles diron a carta de despido e lles dixeron que era por paralización das obras, e que cando se reanuden -que non saben cando poderá ser- xa os volverán chamar'. Otros empleados que aún siguen en la zona indican que 'a empresa dixo que rematamos a finais de mes'.
Este periódico contactó ayer con Adif para conocer sus explicaciones al respecto, si bien de momento no respondieron.
VILAR DE BARRIO-LUBIÁN
Pero los problemas no sólo se están dando en el tramo entre Taboadela y Vilar de Barrio, sino que también desde esta localidad hasta Lubián se han producido cambios de obra en los tramos de la vía izquierda. Unos problemas que ya se vienen produciendo en los últimos tres meses y que Adif justificó en anteriores ocasiones como 'cambios de método constructivo', argumentando que pretenden reducir costes al construir un túnel derecho y, desde él, acceder al izquierdo. No obstante, desde el sector sostienen que la pretensión de Fomento es la de construir la vía derecha y, en la izquierda, abrir sólo el hueco de los túneles (de modo que en el futuro, si continúa la obra, ya no sería necesario emplear explosivos, que supondrían un gran peligro al estar la obra vía en servicio). Esta propuesta coincide con lo que contempla un informe interno de Adif (construir sólo una vía y posponer la otra) pero el organismo público ha negado que lo vaya a poner en marcha.
