Afectados por las preferentes se concentraron este jueves ante la principal oficina de Novagalicia Banco en la calle del Paseo, en el centro de la ciudad de Ourense, como medida de presión para que se solucione su conflicto. Al mismo tiempo, un grupo se reunió con el alcalde, Francisco Rodríguez, para pedirle ayuda.
Una de las afectadas, Diana Pérez, destacó sobre la protesta que se trata de 'concentraciones pacíficas' que realizan para que les devuelven el dinero. Con ellas, pretenden que 'salgan a la luz más afectados', porque, según advierten, 'hay muchos en la provincia de Ourense y en Galicia' y 'algunos todavía no lo saben'. 'Queremos que la gente conozca nuestro problema', abundó.
Pérez explicó que, una vez en las sucursales, entran 'como clientes' y preguntan 'por el problema' que tienen. A este respecto, constató que a los trabajadores 'no les gusta': 'Dicen que damos mala imagen', apuntó. De hecho, aseguró que este jueves llegaron a apagar las luces de la oficina y les señalaron a los afectados que tenían una 'avería en los ordenadores' para 'no tener que dar explicaciones'.
A la misma hora que tenía lugar esta concentración, otro grupo de afectados se reunió en el Ayuntamiento de Ourense con el alcalde, Francisco Rodríguez. Pérez pidió que el regidor municipal les 'brinde su apoyo' porque -incidió- la solución 'debe tener carácter político'.
La afectada reconoció a las puertas de la sucursal bancaria que su futuro es 'muy negro' ya que 'hay que esperar a la recapitalización' de la entidad financiera y, en este sentido, afirmó 'no saber si los ahorros valdrán el 100 por cien o menos', porque Europa les considera como accionistas mientras reivindican ser 'solo ahorradores'. Ante esto, 'seguir haciendo presión es la única solución que tenemos', concluyó.
Pérez explicó que, una vez en las sucursales, entran 'como clientes' y preguntan 'por el problema' que tienen. A este respecto, constató que a los trabajadores 'no les gusta': 'Dicen que damos mala imagen', apuntó. De hecho, aseguró que este jueves llegaron a apagar las luces de la oficina y les señalaron a los afectados que tenían una 'avería en los ordenadores' para 'no tener que dar explicaciones'.
A la misma hora que tenía lugar esta concentración, otro grupo de afectados se reunió en el Ayuntamiento de Ourense con el alcalde, Francisco Rodríguez. Pérez pidió que el regidor municipal les 'brinde su apoyo' porque -incidió- la solución 'debe tener carácter político'.
La afectada reconoció a las puertas de la sucursal bancaria que su futuro es 'muy negro' ya que 'hay que esperar a la recapitalización' de la entidad financiera y, en este sentido, afirmó 'no saber si los ahorros valdrán el 100 por cien o menos', porque Europa les considera como accionistas mientras reivindican ser 'solo ahorradores'. Ante esto, 'seguir haciendo presión es la única solución que tenemos', concluyó.
