Un niño de padres colombianos, Daniel Vega, nació en el CHOU y fue el último de Galicia con derecho a la subvención

Ainhoa González es el primer bebé ourensano sin cheque de 2.500 euros

Los felices padres con su hija, Ainhoa, y la bisabuela de la niña.
Nunca dar a luz cerca del cambio de año había generado tanta expectación. Esta vez se hallaba en juego el 'cheque bebé', la prestación de 2.500 euros que el Gobierno central puso en marcha a mediados de 2007 como ayuda a las familias por cada hijo concebido o adoptado. Y en Ourense la la peculiaridad convive en la misma habitación del Complexo Hospitalario, aunque a las dos familias les preocupe menos la ayuda a recibir que la salud de sus hijos.
Allí descansaban ayer, tras varias horas de parto, las madres que han dado a luz al primer bebé ourensano de 2011, Ainhoa González Vide, y al último de 2010, Daniel Vega Guerrero. Éste aún recibirá la ayuda, pero ayer no pudo ser fotografiado porque un pequeño problema al nacer, nada grave, le mantiene en cuidados intensivos. Ella, Ainhoa, no tendrá cheque, pero ya reposa feliz en brazos de su madre. Al final, lo importante no es el dinero, precisaban los padres de ambos bebés, sino que el niño y niña 'lleguen con salud'.

El último bebé del año 2010 en la provincia, Daniel, llegaba al mundo a las 23.00 horas y sus padres Sandra Milena Guerrero y José Vega, ambos originarios de Colombia. Daniel se convertía en el último niño nacido en Galicia y Sandra en la última madre gallega que recibirá la prestación. Con un peso de 3,930 kilogramos. Daniel nació mediante cesárea con un leve problema respiratorio que, al cierre de esta edición, lo mantenía en cuidados intensivos. Nada grave, pero su madre, que lo visitaba ansiosa en la UCI, no se mostraba especialmente entusiasmada con los 2.500 euros, los cambiaría por que su hijo descansase junto a ella en la habitación.

Como contrapunto, Patricia Muñoz y Diego González, ourensanos los dos, son los primeros padres que se ven privados del cheque, pero ayer estaban igualmente felices con su hija.

Si pudiesen escoger, preferirían la ayuda, pero insisten en que tampoco es tan importante, si bien, la diferencia ayer entre haber nacido en 2010 o en 2011 son nada menos que 2.500 euros. Ainhoa, que nació a las 4.30 horas de la madrugada, pesó 3.310 kilogramos.

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