La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, acoge a partir de este jueves el juicio contra dos albaneses acusados de robar en hasta once domicilios entre los días 26 y 30 de noviembre de 2018 en Ourense y Pontevedra junto a otros tres socios que se encuentran en rebeldía.
La Fiscalía pide para ambos una pena de seis años de prisión por sendos delitos de robo con fuerza en casa habitada, mientras que para uno de ellos -que ya había sido condenado por hechos similares por un juzgado de Barcelona- también reclama otros tres años de prisión por un delito de falsedad documental.
En paralelo, se les exigen asimismo indemnizaciones por valor de 80.569,57 euros por los objetos sustraídos -fundamentalmente joyas- y por los desperfectos causados en las viviendas, toda vez que, de acuerdo con el relato de la Fiscalía, accedían a ellas forzando o rompiendo las ventanas.
Los asaltos que se les imputan se registraron en el municipio de Barbadás (Ourense) y en los pontevedreses de Mondariz-Balneario, Cambados, O Porriño, Ponteareas y Moaña, así como en la capital provincial.
Todos los hechos se produjeron en un lapso de cinco días y siempre entre las 19.00 y las 20.00 horas, llegando a llevar a cabo hasta tres asaltos en menos de una hora.
Aunque en diez de los asaltos lograron acceder a las viviendas y sustraer objetos de valor, su tentativa se vio frustrada en una ocasión en Barbadás, donde la aparición inesperada de su propietaria les llevó a escapar.
Interceptados en la A-52
Los dos acusados fueron interceptados el 4 de diciembre de 2018, pocos días después de la ola de asaltos, mientras conducían por la A-52; uno de los acusados se identificó ante los agentes de la Guardia Civil con un permiso de conducir falso de la República Checa.
Dicho permiso de conducir, fabricado de manera ilegítima, había sido elaborado en un soporte de plástico, sobre el que se había realizado el diseño mediante sistemas de impresión térmica y de sublimación, simulando la reacción bajo luz ultravioleta con tintas fluorescentes.
En el registro del vehículo, los agentes localizaron una garrafa de aceite en la que escondían 1.636 gramos de joyas; acto seguido, el Juzgado de Instrucción número dos de Verín decretó su ingreso en prisión provisional, que sería ratificada posteriormente por el Juzgado de Instrucción número uno de Santiago.
Está previsto que el juicio se prolongue a lo largo de jueves y viernes.
