Las discusiones se producen a diario, lo que provoca que el espacio de ocio quede inutilizado
Las discusiones y peleas que mantienen a diario las personas, en su mayor parte indigentes, que se instalaron en la Alameda do Cruceiro con los vecinos que residen en las calles adyacentes mantienen infrautilizado el Parque Infantil que hay en el espacio de ocio. Las parejas con niños no los llevan a jugar a las instalaciones "porque no sabes con lo que te puedes encontrar. Les dices algo y enseguida y pronto comienza a discutir, a insultarte", apuntaba ayer uno de los residentes, Antonio Pazos.
Un grupo de ocho personas permaneció toda la jornada de ayer en la alameda. Mientras unos bebían alcohol, otros comían e incluso dormían en los múltiples bancos que hay a lo largo de los pasillos. "Ya no paso por ahí. Te fichan y te insultan. No tengo miedo, pero lo peor es que me ven entrar en mi casa y tengo miedo de que me pase algo", comentaba otra residente, María Luisa Cuesta.
El grupo de alborotadores no está dispuesto a marcharse y los sucesivos enfrentamientos con los vecinos mantienen a todos sus miembros en alerta. Los vecinos ya no suelen pasear por el lugar en que se sientan, pero la presencia de cualquier extraño que se les acerque provoca que todos se pongan a un tiempo de pie y reaccionen de forma violenta. "No molestamos a nadie. El parque es público", argumentan.
Su actitud provoca que los vecinos llamen a diario a la Policía Local y al Concello, instándoles a establecer más vigilancia en la zona y desalojar a los alborotadores. Las peticiones, que en su gran mayoría fueron dadas a conocer a través de La Región, no han recibido aún la respuesta esperada por los vecinos por parte del Concello y la Subdelegación del Gobierno. Eso sí, la entidad local convocó ayer una reunión, en la que participaron el alcalde, Xesús Vázquez; el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro; el concejal de Seguridad Ciudadana, Carlos Campos; el comisario del Cuerpo Nacional de Policía, Antonio Álvarez, y la intendente de la Policía Local, María Barrera. Acordaron incrementar la vigilancia policial, no solo en el Parque Infantil, también en el Jardín do Posío y en la Alameda. En estos dos últimos, según dio a conocer el Concello, también hay registradas llamadas de vecinos quejándose de la presencia de grupos de personas que ocupan los parques las 24 horas e increpan al resto de usuarios.
Políticos y fuerzas de seguridad se reunirán dentro de un mes para valorar si la vigilancia fue eficaz.
Obras de mejora y renovación de los equipos de juego
El Concello, además de la vigilancia policial, tiene previsto acometer una mejora en la Alameda do Cruceiro. Los trabajos afectarían al firme y a los equipos de juego de los niños. Los trabajos servirían para desalojar al grupo, dado que durante el tiempo que duren las obras se impediría el acceso a personas.
