Además de la ciudad, 80 concellos ourensanos tienen que hacer frente al descuento de importantes partidas tras la liquidación de 2008. Las mayores son las de O Barco, Carballiño y Verín, que pagarán 276.000, 266.000 y 242.000 euros, respectivamente, seguidas de Xinzo (191.000), Pereiro (123.000), Cartelle (111.000) y Lobios (101.000).
'Al tener que realizar estas devoluciones, muchos Ayuntamientos nos vamos a ver en una grave situación y no sé si lograremos mantener los servicios básicos', señalaba ayer la alcaldesa de Cartelle, Carmen Leyte, que argumentaba que los concellos son la administración más cercana al ciudadano y éste les pide cada vez más servicios, pero cada vez disponen de menos recursos y no se aborda la reforma de la financiación prometida. A pesar de ser un municipio pequeño, Cartelle está entre los que tienen una devolución por encima de 100.000 euros, cuantía que supone entre un 15 y 20% de lo que perciben al año. 'Estamos preocupados, no sé cómo vamos a hacer', señalaba la alcaldesa.
Por su parte, Francisco García, alcalde de Allariz (Concello que debe devolver 87.000 euros), señalaba que es una cuantía importante (equivale a una mensualidad de lo que reciben del Estado), pero 'non vai pór en risco os servizos municipais'. Sin embargo, se mostró muy crítico con el sistema de financiación municipal, porque no se tienen en cuenta criterios como el de la dispersión poblacional, muy importante en Galicia, ya que ocasiona un mayor coste en la prestación de servicios que en otras regiones. 'É precisa unha financiación máis xusta' reclamó.
Por su parte, Francisco García, alcalde de Allariz (Concello que debe devolver 87.000 euros), señalaba que es una cuantía importante (equivale a una mensualidad de lo que reciben del Estado), pero 'non vai pór en risco os servizos municipais'. Sin embargo, se mostró muy crítico con el sistema de financiación municipal, porque no se tienen en cuenta criterios como el de la dispersión poblacional, muy importante en Galicia, ya que ocasiona un mayor coste en la prestación de servicios que en otras regiones. 'É precisa unha financiación máis xusta' reclamó.
