La regulación del tráfico rodado en la Ribeira Sacra, a las puertas de ser examinada por los expertos de la Unesco y pendiente de un plan conjunto que elabora la Xunta de Galicia para poder ser declarada Patrimonio de la Humanidad en 2021, es uno de lo asuntos que está encima de la mesa y de lo que los concellos son conscientes, tras la voz de alarma dada desde la asociación de casas rurales.
Los regidores de la zona ven necesario adoptar medidas, aunque afirman que "haberá que estudalo a fondo, hai que pensalo ben antes de tomar decisións", dice el alcalde de Nogueira de Ramuín, José César Parente. Ya se han tomado algunas decisiones en fechas señaladas, y en Nogueira han delimitado el acceso por coche al parador de Santo Estevo los días de máxima afluencia por grandes eventos.
"Hai puntos, como na zona dos catamaráns, que está ben organizado, con lugares restrinxidos para os coches, pero algún aparca igual. Non temos Policía Local", indica Parente. La masificación que se da en la capitalidad "vaise levando".
El presidente de Ribeira Sacra Rural, Francisco Xabier Almuíña, señaló que en conversaciones con distintos establecimientos habían pensado en plantear la prohibición del tráfico rodado en los puntos de máxima afluencia, debido a la posible masificación."Está claro que debemos previr, non podemos deixar que nos pille o touro, pero pouco a pouco entre todos iremos dando pasos", añade Parente, que deja claro que hay que contemplar que "non é o mesmo o que pasa en Semana Santa, xullo ou agosto, có resto de ano".
En Parada de Sil, con el monasterio de Santa Cristina como gran atractivo, también están dispuestos a tomar medidas. Solo el lunes, pasaron 500 turistas. "Non podemos botar a perder este ecosistema que tanto tempo non custou poñer en valor. Entendo á xente, claro que o tráfico hai que regulalo, se non é un caos, cómennos os coches", indica Aquilino Domínguez, regidor, que ya ha planeado la creación de dos líneas de autobús desde el pueblo para el uso de turistas " a un prezo adecuado",y que e mejorará la comodidad de los visitantes. "É unha das cousas que poremos en marcha o ano próximo", indica Domínguez.
Baltar: "Sen volta atrás"
El presidente de la Diputación, Manuel Baltar, cree que "todo o que sexa ordenar, e máxime tendo en conta as opinións dos alcaldes e a situación que os residentes manifestan, está ben". Baltar señala que la Ribeira Sacra está en "auxe, un camiño e un obxectivo xa sen volta atrás, e que vivirá un momento importante cando se declare Patrimonio Mundial e que vai a ser un dos sitios obrigados de visita".
En ese sentido, "a planificación e a programación deben ser coherentes", añade Baltar, que avanza que la Diputación ya ofreció su colaboración, por ejemplo, al alcalde de A Teixeira, en relación al embarcadero para coger los catamaranes. "Estamos abertos a calquera operación que faga sostible, programado e planificado para que non cause ningún tipo de disturbio aos visitantes e aos turistas para causar a mellor imaxe da provincia”.
"Hai que deixar claro que será unha ordenación, e non unha prohibición"
El mandatario de Parada de Sil, Aquilino Domínguez, dice que es necesario explicar que hay que acometer una "ordenación do tráfico" y no hablar de prohibiciones, para evitar que la gente se asuste: "O que temos claro é que o turista se sinta cómodo. Que non teña que estar pendente de se aparcou ben, de se o coche estorba . Iso reflicte na calidade".
Los regidores coinciden en la necesidad de realizar un estudio concreto del perfil de turista para acometer dicha regulación. "Necesitamos crear unha ordenanza e facer as cousas ben", sostiene Domínguez. "A idea é separar os coches en Parada, onde hai un aparcamento gratuíto, e desde aí desplazalos en autobús ao mosteiro, con varias liñas".
Habitual en España
La regulación es algo habitual en muchas parajes naturales españoles. De hecho, un estudio del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) publicado el año pasado ya demostraba el impacto de las carreteras y el tráfico en la biodiversidad de zonas naturales. Las vallas de control para evitar acercarse a puntos clave es ya normal en Doñana; parques naturales de Murcia, y otras zonas naturales de toda España. El pasado mes de marzo, el Cabildo de Fuerteventura sacó una ordenanza para restringir el tráfico en todas sus zonas naturales, imponiendo un número máximo de vehículos por franja horaria; y en Asturias acaban de estrenar un sistema de barreras en los Lagos de Covadonga.
