La provincia de Ourense se enfrenta al reto del abandono del rural y del minifundismo con nuevas herramientas, como la recientemente estrenada "aldea modelo", que intenta superar una etapa de concentración parcelaria que parece no ser capaz de obtener réditos suficientes para poner en valor la tierra, crear empleo y fijar población en el rural.
"Pretender que as franxas antiincendios estean limpas con desbroces anuais é moi difícil de asumir", señala el director xeral de Desenvolvemento Rural, Miguel Pérez Dubois, que justifica la necesidad de implantar un modelo en el que se limpie una vez y, después, se implanten actividades económicas.
El problema de las herencias está pasando factura a la distribución de la tierra, ya que, lejos de disminuir el número de propietarios, en Ourense va a más, como acreditan los datos del Catastro recogidos por la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias.
Cada vez más propietarios
En el último año, el número de propietarios de parcelas subió de 399.428 a 402.060. Hace 10 años, eran casi 30.000 menos. Y la singularidad de la extrema fragmentación queda de manifiesto al comprobar que hay más parcelas rústicas (3.634.224) solo en Ourense que en toda Andalucía y Extremadura, Y casos que llaman la atención, como Cartelle (106.886) o Avión (93.427), donde estas multiplican casi por 100 el número de residentes. "El minifundismo no nos deja avanzar, y cuanto antes seamos conscientes de ello, antes le pondremos soluciones al grave problema de abandono del rural", señala el presidente de la patronal inmobiliaria, Benito Iglesias.
La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Rural, está impulsando "aldeas modelo", que surgieron tras un convenio con la Federación Galega de Municipios e Provincias y la empresa pública Seaga, que se encarga de las limpiezas.
Esta nueva herramienta, mediante la cual se ejecutan desbroces en las denominadas franjas de protección a 50 metros de las casas, incluye el compromiso de los vecinos de ceder las parcelas al Banco de Terras para poder poner en marcha actividad agroganadera.
Es una nueva filosofía. Ya no se quiere limpiar por limpiar, sino que allá donde se haga, ha de implantarse actividad agroganadera. "É un primeiro paso, non só é limpar 50 metros arredor dos núcleos, que é o que marca a lei; hai que facer algo máis e xerar actividade económica neses terreos para non ter que limpar cada ano".
La aldea de Osmo (Cenlle) ha sido la primera en sumarse, tras poner de acuerdo a todos los vecinos. O Ribeiro es la cuarta comarca, tras Carballiño, Celanova y Verín, según los datos de Fegein, con más propiedades. En Cenlle tienen más de 10.000 para apenas 1.140 habitantes en la actualidad, por lo que se presentaba como una gran oportunidad.
"En canto soubemos do proxecto fixémosllo saber aos veciños. Viven só 15 persoas, e case ninguén vai ás reunións, pero aquel día xuntamos a 30", resalta el alcalde de Cenlle, Gabriel Alén. Reviven las tierras "dunha aldea aletargada" que en su día fue agrícola, añade.
Un proceso "laborioso"
Conseguir las adhesiones de todos fue un "proceso moi laborioso", no por los vecinos, sino "porque a maioría non vive aquí, hai unha serie de persoas en Arxentina, Mallorca... e o proceso de enviar papeis e explicalo desde a distancia é difícil".
Dubois reconoce que en el rural hay una "psicoloxía" distinta, pero ve más confianza "ao facer a cesión co Banco de Terras, que asegura o aluguer en caso de impago". Considera que este proceso es un "win-win", porque "hai superficie que non está limpa nin traballada, e agora o propietario pode recibir unha renda e, ademais, cumprir coa súa obriga, que é ter os terreos coidados. Gañamos todos e fixamos poboación".
El regidor, por su parte, cree que sirve "para dar vida" y no solo para proteger de los incendios: "Pódense xerar produtos de alto valor engadido , e non hai por que ir a unha liña low-cost". En breve, con parte de los terrenos que Seaga ya ha limpiado a lo largo de la semana, se pondrá en marcha una nueva explotación. "Vai ben encamiñado e é unha familiar que se vai asentar aquí", indica Alén.
"Osmo é o exemplo , animaranse máis"
"Osmo é o exemplo a seguir e a primeira pedra, animaranse máis se ven que a primeira iniciativa é boa, pero xa hai 26 concellos que solicitaron unha aldea modelo, e en só dous meses", explica Miguel Pérez Dubois. A las "aldeas modelo", en las que Seaga limpia franjas a cambio de la cesión de terrenos para su explotación durante 5 años, se puede suscribir cualquiera y no solo parroquias de alta actividad incendiaria. Ha suscitado interés en Nogueiró (Cartelle) o Alvite (Beariz), que están en lista de despegue. "Temos unha lei de concentración parcelaria de 2015, pero cremos que somos máis efectivos modificando a estrutura dos usos e non só da propiedade. Por que o que vive en Barcelona e ten a obriga de limpar se vai negar a que unha empresa limpe e lle consiga unha renda?", apunta Dubois.
