El Juzgado de lo Penal número 1 de Ourense condenó a un año de prisión y 1.200 euros de multa a José Manuel Gómez Rúas, de 43 años, por un delito de obstrucción a la justicia, y a 75 euros de multa por una falta de amenazas.
Los hechos constitutivos de estas penas ocurrieron en octubre de 2005 en el Pazo da Xustiza de Ourense, donde el acusado se encontraba como parte en un juicio de oposición de medidas de protección de menores. Tras la declaración como testigo de una educadora familiar, y molesto con sus pronunciamientos, el acusado le dijo que iba a ir a su casa. Una vez fuera de la sala reiteró las intimidaciones, pero ampliando el mensaje a la madre de la educadora.
