OURENSE

Alumnos de la ciudad reciclan y envían ordenadores a Senegal

ESCOLARES SENEGAL
photo_camera Escolares de primaria de la escuela Thillé Boubacar, en Podor (Senegal), con los equipos recibidos.

El CIFP de A Carballeira es el único gallego que participa en el proyecto, que implica a 127 países 

Una treintena de alumnos de los ciclos de Administración de Sistemas Informáticos en red y Sistemas microinformáticos y redes del CIFP A Carballeira arreglan ordenadores que están llegando a escuelas de todo el mundo. Los últimos equipos que reciclaron los chavales ya los están utilizando en sus clases niños del centro de primaria Thillé Boubacar, en Podor, una pequeña ciudad de Senegal. Una cadena de cómplices hace posible este proyecto en el que colaboran 127 países y más de mil escuelas. En España participan cerca de 20 centros educativos; el CIFP A Carballeira es el único de Galicia. 


Un blablacar solidario


La iniciativa se llama "Labdoo" y funciona como una red social de colaboración en la que se envían ordenadores cargados con aplicaciones educativas a colegios. Sin coste económico y sin generar emisiones adicionales de CO2 al planeta. ¿Cómo? Como un "Blablacar" solidario. Cualquier ciudadano que tenga un viaje programado puede registrarlo en la web del proyecto y si el itinerario coincide–total o en parte–con el lugar de destino de los ordenadores, puede ofrecerse a llevarlos. En alguna ocasión, los profesores que impulsaron el proyecto en el CIFP A Carballeira tiran de familiares o amigos. "A veces si vemos que hay un viaje y que los chavales no tienen clase y no pueden hacerse cargo de los ordenadores, los profes también nos ponemos manos a la obra", confiesa Juan José Lorenzo, uno de los docentes que apoya la iniciativa, junto a Juan Nieto y Carina Cabanelas. 

Alexis, Noel, Álex, Brais,  Pablo, Iago y Juan; alumnos de Informática del CIFP A Carballeira.


Aprendizaje-servicio


"Nos llegaron los ordenadores y nos comentaron que había que prepararlos para enviar a otros alumnos de escuelas más desfavorecidas. Planeamos cómo hacerlo y creamos grupos entre los compañeros. En unas cuantas clases los montamos y la verdad es que nos quedamos muy contentos cuando supimos que habían llegado a una escuela con menos recursos en Senegal. Siempre es gratificante", comenta Pablo Gil, uno de los alumnos.

Llevan tiempo colaborando con este proyecto y las donaciones de ordenadores se producen desde casos particulares hasta organismos. El Sergas ha sido uno de los colaboradores más recientes, conocedores de la iniciativa, enviaron equipos usados al centro educativo. "En arreglar un equipo podemos tardar dos clases, en una semana más o menos los tenemos listos. Depende en qué estado vengan", cuenta Brais Sánchez, otro de los alumnos de A Carballeira que participa en el proyecto, que además de fines solidarios, promueve  en la docencia el método aprendizaje-servicio.

Alexis, Noel, Álex, Brais, Pablo Iago y Juan son parte de los alumnos del CIFP A Carballeira que ya esperan más donaciones de ordenadores para reciclar. 

Te puede interesar