La joven no acudió a dormir al centro educativo el domingo y sus pertenencias habían sido encontradas en un bar cercano a la escuela
Una menor (15 años) movilizó en la noche del domingo y madrugada del lunes a la Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local después de que sus padres llamaran a la Comisaría de que no había llegado al colegio religioso en el que está internada.
La adolescente pasó el fin de semana con sus padres en la comarca de Monterrei y sobre las 21,00 horas del domingo debía ingresar de nuevo en el centro educativo, pero no lo hizo.
La joven alertó a sus padres de que ya había llegado a la ciudad, pero antes de ir al colegio prefería disfrutar del partido de fútbol Real Madrid-F.C. Barcelona en un bar cercano al colegio. Sus padres le dieron la autorización, pero la alarma saltó cuando, finalizado el partido, la menor no acudió al colegio ni daba señales de vida.
Una patrulla acudió de inmediato al local de hostelería y comprobó que había estado allí. De hecho, en una esquina de local estaba su maleta con la ropa y resto de enseres.
Así, los agentes iniciaron un dispositivo de búsqueda, en el que participaron Policía Local y Guardia Civil, por toda la ciudad y sus alrededores.
El rastreo quedó suspendido a las 09,00 horas de lunes a aparecer la joven para acudir a clase, alegando que había estado con unas amigas.
