Los aranceles de Estados Unidos castigan a las bodegas ourensanas

Los aranceles aplicados por el Gobierno Trump a las importaciones de vino de Estados Unidos castigan las exportaciones de las denominaciones de origen de la provincia. No sólo a ellas, entre noviembre de 2019 y marzo de 2020, España dejó de ingresar 2,5 millones de dólares, según informó el Observatorio Español del Mercado del Vino, refiriéndose al principal cliente de los exportadores de un buen número de bodegas ourensanas. Las embotelladoras valdeorresas declararon haber exportado 71.305 litros al país americano en la última campaña (2018/2019), situando al mercado estadounidense por delante de los 50.104 que adquirió el Reino Unido, otro país que también amenaza al sector, aquí a expensas de lo que suceda con el "brexit". Estados Unidos también es el principal destino de los caldos de la Ribeira Sacra, aunque aquí, seguido de Noruega y Reino Unido. Desde la D.O. Ribeiro apuntan a una "reorientación de mercados" como posible vía de actuación. La aplicación de unos aranceles del 25 % suponen "un incremento de prezo considerable", según explicó el presidente del Consello Regulador de la D. O. Valdeorras. José Luis García Pando ve muy difícil realizar una estimación del descenso por coincidir en el tiempo con los efectos de la crisis sanitaria del covid-19. Explicó que está a la espera de que el Gobierno de Estados Unidos revise el gravamen en agosto, el cual grava los vinos de menos de 14 grados, que son la mayoría de los embotellados en Valdeorras. Con miras a contrarrestar el encarecimiento del vino, importadores y bodegueros debaten asumir el incremento "para manter un prezo razoable", dice García. La presidenta de la Asociación Empresarial de Valdeorras (AEVA), Araceli Fernández conoce bien el problema, pues está al frente de la bodega Godeval S. L. , que destina al mercado estadounidense buena parte de la producción. Considera que si exportadores e importadores asumen el coste nuevo impuesto para rebajar el precio final, "no merece la pena vender. Hay que buscar otras soluciones". Sí encuentra conveniente seguir en el mercado de Estados Unidos, pues "es muy prescriptor y necesitas estar para que nuestros vinos se vean en el mundo", pero apuesta por buscar nuevos clientes. "Las bodegas de Valdeorras tenemos mucho trabajo por hacer en el mercado nacional. No estamos posicionados como deberíamos", aseguró. Convenio El presidente del Consello Regulador da D. O. Ribeiro, Juan Casares, señaló que Estados Unidos es soberano para poner aranceles, aunque no sea bueno para el libre mercado, ni tampoco para los consumidores, que se pueden ver privados en productos de calidad como el vino de O Ribeiro. Apuntó que le corresponde negociar a la Unión Europea, y al Gobierno del Estado hacer la propuesta para esa negociación o para implementar medidas de reparación de la situación. Además, dijo que "cada empresa ten que analizar en qué medida lle afecta e tomar as súas propias decisións en función da súa situación financieira". Juan Casares considera que Galicia puede "reorientar as súas políticas de internacionalización. Precisamente en próximos días firmaremos as cinco denominacións un convenio co Igape para un plan de internacionalización e un dos obxectivos pode ser reorientar a internacionalización á procura de novos nichos, como pode ser no centro de Europa e Asia". La presidenta de la D. O. Monterrei, Lara Da Silva, explicó que la preocupación de la entidad se centra estos días en la situación que atraviesa el país. "A nivel internacional, depende de cada bodega si quiere subir o bajar el precio para seguir entrando en el mercado estadounidense", dijo. En la Ribeira Sacra, José Manuel Rodríguez, explicó que los aranceles de Estados Unidos "afectan máis aos viños que van a precio" y que bodegueros que exportan al mercado norteamericano tienen comentado que "a venta baixou". El BNG pide medidas de choque y un plan de actuación a medio plazo La necesidad de adoptar medidas de choque "inminentes e directas da Xunta de Galiza para paliar a crise do covid-19 no sector vitivinícola galego, así como un plan de actuación a curto e medio prazo que o potencia de xeito estable" fue tratada en la teleconferencia que la representante del BNG, Noa Presas, mantuvo con miembros de la Asociación Galega de Viticultura. En la cita estuvo acompañada por los parlamentarios Luis Bará y Xosé Luis Rivas "Mini". Noa Presas adquirió el compromiso de "volver poñer o rural no centro da política galega como un sector económico estratéxico na Galiza", aludiendo a un posible cambio de Gobierno en el Ejecutivo gallego, tras el 12X. La representante de la Executiva Nacional del BNG escuchó las explicaciones de la representación de la Asociación Galega de Viticultura, formada por su presidente, Roberto Rivas Reboredo; el coordinador, Xan Bautista; y el vocal Iván Bello. Durante la cita, no solo hablaron del covid-19, también mostraron su preocupación por la "guerra comercial cos Estados Unidos, así como por outros problemas estruturais, polos cambios na reforma da PAC ou a entrada de capital estranxeiro nas Denominacións de Orixe galegas", según informó el BNG. Presas defendió la intervención de la Xunta con ayudas al sector para mantener el empleo, para el financiamiento y también la aplicación de exenciones fiscales. Además, propuso abrir un proceso de diálogo a través de las mesas del vino para elaborar un plan estratégico del vino gallego.