Botellones, alteraciones del orden público, una pelea en la praza das Mercedes, una infracción de horario, un hombre con un arma blanca en el interior de un pub de la zona histórica y llamadas por ruidos en viviendas fueron algunas de las consecuencias del fin de semana en la ciudad, el último con limitación de horario hasta las 3 de la mañana. Con una explosión de macrobotellones y altercados por toda España, en Ourense parece que el suflé de agosto ya no va a más.
La colaboración entre cuerpos policiales ha conseguido evitar grandes aglomeraciones de personas para beber en la vía pública, si bien la dispersión del botellón por distintos espacios de la urbe complica y lleva el problema de los ruidos a otras zonas. Solo este fin de semana, hubo dispositivos de vigilancia por As Burgas, Correxidor, rúa San Pedro, Aa Mercedes, Pena Corneira, Cabeza de Manzaneda, praza de San Antonio, zona Auditorio y el parque da Zapatilla, en San Francisco.
Un total de seis patrullas de la Policía Local y la Policía Autonómica intentaron poner coto a los botellones. Se vieron obligados a disuadir grupos en la praza da Estrela, tanto viernes como sábado, y también en el parque de Calpurnia Habana, en el entorno de As Burgas. Asimismo, las fuerzas policiales tuvieron tres requerimientos por botellones en otros puntos. Como consecuencia de todo eso, identificaron a tres personas tras una pelea originada en la praza das Mercedes y a otros tres en las confluencias de las rúas Pena Corneira y San Pedro (donde hace dos semanas hubo ya una reyerta multitudinaria), en este caso por alteración del orden público.
La movida
Además del botellón callejero, se suman las fiestas en los pisos, que provocaron seis llamadas a la Policía Local por ruidos en casas.
Dentro de la movida nocturna, hubo dos llamadas por quejas de ruidos en pubs y en la noche del domingo al lunes, los agentes intervinieron un cuchillo a un hombre que estaba causando problemas en un bar de la zona histórica. También en la noche del domingo al lunes -el auge de clientes lleva a muchos pubs a abrir también los domingos noche- la Policía tuvo que acudir a las calles del Casco Vello, por llamadas del vecindario.
A todo ello, se suma una denuncia a un pub de la rúa San Francisco por sobrepasar el horario de las tres de la mañana y una denuncia a un “falso pub” en rúa Pizarro, el Golden, que seguía abriendo pese a carecer de licencia. Para este último, parece que fue el último fin de semana.